En una de las fotografías oficiales de la ceremonia en la que el gobernador Juan Manuel Carreras inauguró un campus de la UASLP en Salinas, aparece muy sonriente y sin pena alguna o preocupación que le embargue, el ex presidente municipal de la capital, Mario García.
Ahí está, junto al Secretario de Educación y en la misma fila con el gobernador y el rector de la universidad. Ahí está, al parecer sin remordimiento alguno sobre los problemas que le dejo a la ciudad que mal gobernó durante tres años.
Mario García anda penando pero eso no quiere decir que sea suficiente para que enfrente la responsabilidad que deriva de sus errores y omisiones como alcalde. Que aparezca en un evento público del gobernador, puede indicar que el mandatario lo apoya y que le protegerá con un manto de impunidad.
No solamente dejo una deuda pública impagable sino que dejó problemas que de un momento habría de explotar, tal es el caso del servicio de recolección y disposición final de la basura. En su administración, se dejaron de cumplir compromisos de pago por casi 100 millones de pesos.
A cambio, permitió que la empresa Red Ambiental hiciera lo que quisiera, por ejemplo, violar el contrato de servicios en el que se comprometía a que contar con un sitio adecuado para la disposición final de los residuos. Lo empezaron a construir años después de fijado el plazo en el contrato y ahora mismo, eso esta suspendido.
Pero Mario García anda tan campante, sabe que la impunidad es en San Luis Potosí uno de los usos y costumbres de la clase política.
La empresa regiomontana decidió suspender el servicio de recolección de basura hasta que el ayuntamiento de la capital pague el adeudo, lo cual, el alcalde Ricardo Gallardo no parece estar dispuesto a hacer.
El problema es muy serio, pero dentro de esa gravedad, hay niveles de responsabilidad y al parecer, la mayor le toca a Mario García. Con el pretexto de falta de liquidez, el municipio dejó de pagar pese a tener pleno conocimiento de las implicaciones que eso le traería a la ciudad.
La ciudad ha sido lleva a un plano de crisis por administraciones desastrosas y con serias dudas sobre su actuar íntegro. El problema de la basura es solamente uno, pero ahí está el de la deuda y también en cualquier momento podría tronar el del alumbrado, también concesionado.
Contratar empresas para que se hagan cargo de los servicios municipales no está mal, el problema es que los alcaldes lo hagan con la única intención de quitarse un problema que les pueda dañar la imagen. La empresa Red Ambiental reclama lo que le deben y el municipio no sabe que hacer, salvo responder de manera bravucona cuando en realidad, se trata del eterno problema de las autoridades ineficientes y de alcaldes soberbios.
Si la fiscalización de recursos públicos y la rendición de cuentas fueran cosa que se toma en serio en San Luis Potosí, Mario García ya estaría temblando, pero todo hace indicar que ya nunca le preocupó nada.
