Antonio González Vázquez
La irresponsabilidad de las autoridades en materia de seguridad del ayuntamiento capitalino, están heredando una percepción de inseguridad y miedo a la población, lo cual obedece a las políticas fallidas de prevención del delito, proximidad social y la falta de coordinación entre los diferentes órdenes de gobierno.
Maximino Jasso Padrón, Presidente del Comité Directivo Municipal del Partido Acción Nacional, sostuvo que el empobrecimiento en acciones para el combate a la criminalidad está dejando secuelas que serán difíciles de equilibrar para la siguiente gestión municipal.
Ahora que se llevan a cabo los procesos de entrega-recepción, es necesario que se hable con responsabilidad sobre el lastre que se deja en materia de inseguridad, ya que el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, se ha encargado de hacer notar que estamos entre las trece capitales del país con mayor percepción social sobre inseguridad pública.
Incluso cabe añadir que la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana hace referencia clara que no hemos mejorado en seguridad, toda vez que en el mes de marzo un 89.6 por ciento de la población se sentía intranquila y para el mes de junio también de este año, el indicador estaba en un 86.6 por ciento; lo que hace notar que han fracasado los modelos de seguridad en la ciudad.
“La sensación de inseguridad, es cada vez mayor, hemos llegado a niveles indignantes por los robos a casa habitación, asaltos, extorsiones, homicidios, violaciones, entre otros. Todo esto hace evidente que no se trabajó en dar respuesta a los verdaderos problemas de la ciudadanía, y el no haber designado a los directivos de las corporaciones municipales durante un año, provocó que estuviéramos sumidos en esta dinámica”.
Ahora, el líder panista propone la suma de esfuerzos y sobre todo de hacer más eficientes a las corporaciones de seguridad, ya que el nuevo gobierno tendrá en sus manos, la responsabilidad de recuperar el orden y darle la tranquilidad que tanto exige la ciudadanía en estos momentos “tendrá que hacerse un enorme trabajo entre las distintas fuerzas del orden, con miras de trascender del delito y el conflicto, a la confianza y tranquilidad, temas fundamentales para el desarrollo de un buen gobierno”.
