Por Eduardo Delgado
Este lunes Maribel Zúñiga Martínez se presentó en lengua tének ante diputadas de la comisión legislativa responsable del proceso de renovación de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) y su presentación la cerró con una frase a manera de petición a los legisladores: “no votar por silencio… voten por la dignidad de las personas”.
Maribel es originaria de Quelabitab Cuaresma, comunidad del municipio de Tanlajás conformada por unas 350 personas, donde nació en octubre de 1986. Este lunes esa joven de estatura bajita se presentó ataviada con la tradicional indumentaria indígena en el auditorio “Manuel Gómez Morín”.
En entrevista con Astrolabio Diario Digital dijo que fue propuesta como candidata a la presidencia de la CEDH por pueblos y comunidades indígenas de la huasteca potosina, “para romper prejuicios y estereotipos, porque pareciera que estos cargos sólo son para personas de la ciudad”.
Frente a la diputada panista Josefina Salazar Báez y la perredista Dulcelina Sánchez de Lira, precisó que fue postulada por comunidades tének y náhuatl. “Por eso estoy aquí con ustedes”.
Enseguida les remarcó que “todos los pueblos de la tierra son iguales desde su nacimiento, todos los pueblos tienen derecho a vivir y a ser libres”.
“No vengo por un compromiso personal, vengo por un compromiso social. Pertenezco a una comunidad indígena, soy hablante de la lengua indígena”, planteó la joven egresada del plantel de la facultad de Leyes de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí en Ciudad Valles.
Dijo conocer el trabajo que realiza la CEDH y considero ser la persona “idónea para este cargo puesto que estoy decidida a afrontar los retos que están en estos momentos”.
“No vengo sola. Detrás de mí vienen un gran sin número de comunidades, detrás de mí están los ancestros, mis abuelos, mis antepasados”, subrayó.
“Es por ello que traigo esta vestimenta en representación de las comunidades indígenas y como una muestra de la responsabilidad que tengo con ellas”, abundó la joven ataviada con falda en color negro, blusa rosa y sobre esta su colorido quechquemitl y su késkem en su cabeza.
A las legisladoras les expuso, a modo de condena, que pareciera que la presidencia de la comisión garante de los derechos humanos “no es para una mujer y menos para una indígena”.
Al término de su presentación, en el espacio destinado a las preguntas y respuestas, la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos, Equidad y Género en el Congreso del Estado, Dulcelina Sánchez de Lira, le preguntó:
“De resultar electa, ¿de qué manera coadyuvarías como organismo con los poderes, en este caso el Ejecutivo, para realmente llevar un beneficio a las comunidades indígenas que estás representando, y no solamente con ellas sino con todo el Estado de San Luis Potosí, porque todo el Estado no está compuesto por indígenas?”.
En respuesta Maribel le hizo notar que su labor en materia de defensa de derechos humanos no ha sido exclusivo con pueblos y comunidades indígenas, “pues también he trabajado con mujeres aquí en la ciudad y con diferentes instituciones”.
“A lo mejor ese ha sido mi fuerte, las comunidades indígenas, pero trabajaría de una manera intercultural”, anticipó.
Entrevistada al término de su comparecencia ante diputados fue interrogada por el periodista de este medio acerca de si no cree que el proceso de selección del presidente está amañado para favorecer a uno de los quince candidatos a suceder a Jorge Vega Arroyo.
“Por eso hago énfasis en que (los legisladores) no voten por el silencio y realmente voten por la dignidad de las personas”, respondió antes de retirarse del edificio “Presidente Juárez”, en cuyo auditorio las diputadas prosiguieron con otras cuatro entrevistas, con las que completaron las quince con los aspirantes a presidir ese organismo autónomo durante el periodo comprendido del uno de abril de este año al 31 de marzo del 2021.
