María Ruiz
Operativo de Conducción Segura inició con alto índice de faltas administrativas a la Ley de Tránsito municipal este año 2022, pues durante los días 30 y 31 de diciembre del 2021 y hasta el 3 de enero del año en curso se realizaron mil 230 amonestaciones.
Todas ellas van desde multas a conductores sin cinturón de seguridad, hasta automovilistas con menores de seis años en brazos y en el asiento del copiloto, así lo mencionó el director de Seguridad Pública Municipal de San Luis Potosí, Juan Antonio Villa Gutiérrez.
“La realidad es que la gente pasa por alto algo tan importante como es la seguridad. El día 31 estuvimos conjuntamente con otros directores de Vialidad haciendo presencia en varios puntos de la Zona Metropolitana en dónde invitamos a la gente hacer conciencia vial”, declaró.
Esto derivado del alto índice de faltas cometidas por automovilistas en la capital y 17 accidente viales de menor daño y alcance.
“Lamentablemente el día primero una persona perdió el control de su motocicleta y se impactó contra un muro, perdiendo la vida casi automacamente”, refirió.
También dentro de este operativo se detectaron cuatro personas que conducían en estado de ebriedad a las cuales, según lo referido por el comisario, se entregaron a familiares y solo uno fue puesto a disposición de la Fiscalía General del Estado (FGE), debido a que ocasionó un choque automovilístico, lo que causó daños al monumento del asta bandera.
Referente a las posibles multas que pudieran derivarse de estas faltas administrativas como el conducir bajo los influjos del alcohol, el director de la DSPM mencionó que esto solo será una mera acción preventiva para que conductores se concienticen al respecto.
“En el accidente donde se remitió al involucrado a las autoridades de la FGE, por ejemplo, como formó parte peritos ahí sí se aplicaría este es tipo de sanción”, refirió.
Por otro lado, agregó que durante el fin e inicio de año se detuvieron un total de 18 bailes en la vía pública, de los cuales los más relevantes fueron detectados en la colonia J. Aldana, en el Barrio de San Juan de Guadalupe y la colonia Julián Carrillo.
“Los bailes se detuvieron y afortunadamente la gente entendió que fue a favor de prevenir altercados de otra índole, como son las riñas. Además que son eventos que no contaban con autorización para realizarse en la vía pública”, aclaró.