Ciudad de México (23 de abril de 2016).- Algo que la mayoría de las personas exitosas ya sea en el mundo de los negocios, el arte o la política tienen en común es que todos tienen una rutina mañanera regular.

Las decisiones que tomes en la mañana pueden ayudarte a ser exitoso y tomar decisiones saludables por el resto de tu día o sabotear tu bienestar general. Descubre si estas cometiendo errores tempraneros que te dificultan la vida – y como corregirlos.

Utilizar el botón snooze.

Darte cuenta que tienes unos minutos más para permanecer envuelto en tus cobijas siempre parece un regalo – pero ya sea que oprimes el botón una, dos o 10 veces realmente estás alterando el ciclo del sueño de tu cuerpo. Esos minutos extra de sueño – lejos de hacerte sentir más descansado – te dejaran sintiéndote somnoliento y cansado.

¿Por qué? Bueno primero que nada alteras tu ritmo circadiano, que básicamente es tu reloj interno que sigue un ciclo de 24 horas y le dice a tu cuerpo cuando dormir y despertar, haciendo que sientas sueño o que te sientas activo cuando has obtenido el descanso suficiente. Al interrumpir su ciclo el flujo natural de tu cuerpo se altera, haciendo que te sientas cansado por el resto del día.

 

Además el sueño que obtienes en ese corto periodo entre alarma y alarma no es de buena calidad, por lo que puede resultar en desorientación y cansancio general. Por ultimo, dormir suficiente tiempo te ayuda a regular la leptina y grelina – un par de hormonas que controlan el apetito y los antojos. Cuando no duermes bien se desajustan, lo que resulta en que tengas más hambre y que no se sientas satisfecho al comer.

 

Solución: Levántate un poco más tarde. Es posible entrenar a tu cuerpo a levantarse solo, pero para la mayoría de nosotros no resulta muy realista. Tu mejor apuesta es colocar tu alarma un poco más tarde y saltarte el snooze.

 

Ver el celular desde tu cama al despertar.

Dormir con tu celular no sólo te altera a la hora de dormir, también puede tener repercusiones por la mañana. Pasar unos minutos mirando tu celular por la mañana – revisando correos, viendo publicaciones en redes sociales, etc… – puede causarte ansiedad y reducir tu habildad para mantenerte concentrado en el día.

Solución: cambia tu tiempo de pantalla por tiempo zen.

En vez de usar los primeros momentos de tu día para ver Facebook, tomate 10 minutos para respirar y meditar. Estudios han comprobado que meditar regularmente puede reducir la ansiedad, mejorar la concentración y ayudarte a ser más positivo.

No desayunar y sólo beber café.

Reemplazar un cereal o sándwich por un café para bajar de peso y mantener tus niveles de energía al cien parecería una buena idea, pero en realidad podrás estar saboteando tus planes de bajar de peso.

Cuando sólo estás dependiendo de la cafeína – especialmente si estás bajo estrés – para darte energía por la mañana, puedes aumentar la producción de la hormona cortisol. El exceso de dicha hormona puede resultar en grasa abdominal extra, un baja en el funcionamiento de tu sistema inmunitario y alteraciones a la cognición.

 

Solución: encuentra opciones que te hagan sentir satisfecho y aporten energía.

 

Una taza de café al despertar está bien, pero asegúrate de darle un poco de combustible a tu cuerpo. Un malteada de proteínas, una barrita nutritiva o incluso una pieza de pan tostado con mantequilla tienen pocas calorías, pero suficientes nutrientes para  mantenerte energizado y relajado bajo presión.

Fuente: Muy Interesante.