Por Victoriano Martínez
Este martes 7 de mayo podría quedar registrado como un día en el que se dieron dos pequeños avances en el combate a la corrupción y la impunidad.
No obstante ser avances tan pequeños para el largo recorrido que requiere abatir esas dos calamidades provocadas por una clase política depredadora del erario, mostraron la resistencia que, sin ninguna tregua, esos pasos habrán de encontrar, tanto en el terreno jurídico como en el político.
Uno.
Mientras el Ayuntamiento avanza lento en la formulación de denuncias sobre las irregularidades detectadas en la anterior administración, Ricardo Gallardo Cardona asumió la vocería de los ex funcionarios para tratar de descalificar la gestión Xavier Nava Palacios.
En un acto del ayuntamiento de Soledad de Graciano Sánchez, Gallardo Cardona aseguró que a partir de que su padre salió de la alcaldía de la capital se desató la delincuencia y se dejó de trabajar en la prevención del delito.
“Por eso les decimos nosotros desde Soledad, pónganse a trabajar. Y, con todo respeto de las mamás, déjense de chingaderas y dejen de estar haciendo tonterías que le afecten a la gente”, expresó.
Más tarde, en una entrevista en el noticiero estelar de Canal 7, Gallardo Cardona pidió a la administración de Nava Palacios poner en manos de ministerios públicos y jueces la determinación sobre la comisión de los desfalcos presuntamente detectados durante la gestión de su padre, y no usarlos sólo como pretexto para justificar su falta de trabajo.
Una expresión de resistencia de la gallardía que –aunque llega a destiempo y justo cuando se presenta una denuncia penal más por fraude al fisco– tiene asidero en la lentitud con la que los expedientes de las mil 843 observaciones que pudieran convertirse en denuncias han avanzado.
Los casos comienzan a llegar a las fiscalías estatal y federal con tal lentitud que, hasta ahora, la administración de Nava Palacios no ha puesto a prueba como se esperaría de quien anunció, con bombo y platillo, contar con tantos elementos para afirmar que a la gallardía “se le acabó la pachanga”.
Si en algo tiene razón Gallardo Cardona es en que el flujo de demandas debe ser mayor. No contra reloj, pero sí de tal manera que no abra la posibilidad a que los gallardistas prolonguen su juerga de impunidad con cualquier resquicio para tratar de descalificar las acciones de la actual administración.
Dos.
Este martes se citó a la Audiencia de Vinculación a Proceso en contra del ex diputado Mariano Niño Martínez, por la presunta comisión del delito de peculado.
Aunque no se realizó por la solicitud del inculpado de la duplicidad del plazo para aportar pruebas que eviten que sea vinculado a proceso, la convocatoria dejó una revelación: el Congreso del Estado determinó presentar querella en contra del ex diputado.
Noé Yair López García, como representante del Congreso del Estado, informó que los órganos de dirección del Legislativo le dieron la instrucción para querellarse, lo que obligó a la defensa de Niño Martínez a replantear la estrategia.
Un replanteamiento que –es de esperarse– tendrán que enfrentar el resto de los ex diputados denunciados por hechos similares.
Una denuncia más por parte de la administración de Nava Palacios y la querella por parte del Congreso del Estado son buenas señales.
Pequeños avances sobre los que aún está por verse hasta dónde podrán llegar.
