Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer

Por Victoriano Martínez

Hoy es el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, declarado el 17 de diciembre de 1999 durante la 83a. sesión plenaria de la Organización de las Naciones Unidas.

Para autoridades acostumbradas a simular lo que poco tienen voluntad de ser, es un día para pronunciarse a favor de las mujeres, refrendar compromisos que nunca han asumido en los hechos y realizar actos públicos con discursos políticamente correctos.

Se dirán convencidos de la Declaración sobre la eliminación de la violencia contra la mujer.

Reconocerán que la violencia contra la mujer constituye “un obstáculo no sólo para el logro de la igualdad, el desarrollo y la paz, sino también para la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer”.

También que es “una violación de los derechos humanos y las libertades fundamentales (que) impide total o parcialmente a la mujer gozar de dichos derechos y libertades”.

Así mismo que la violencia constituye “uno de los mecanismos sociales fundamentales por los que se fuerza a la mujer a una situación de subordinación respecto del hombre”.

Podrán incluso tomar más citas de la Declaración, pero seguramente omitirán aquellas sobre las que, en los hechos, han mostrado poca voluntad de cumplir, incluso con declaratoria de Alerta de Violencia de Género.

La Suprema Corte de Justicia de la Nación acaba de ordenar una nueva investigación en el caso del feminicidio de Karla Pontigo Luccioto por la negligencia de la autoridad que en turno, y la actual –lejos de actuar con la debida diligencia que plantea la Declaración, reacciona con la postura burocrática del “aún no hemos sido notificados”.

En su afán por aparentar que cumplen, a más de dos años de la declaratoria de Alerta de Género justifican haber cumplido sólo tres de diez acciones con un llamado a ver las cosas por el lado positivo.

“Podría usted ver que hay un cumplimento mayor al incumplimiento, que Conavim ha dicho que el 45 por ciento está cumplido, el 25 está en vías de cumplimiento y sólo en tres de cada 10 acciones no se ha hecho nada, es un modo de ver las cosas”, dijo Ulises Valencia, subsecretario de Derechos Humanos del gobierno estatal.

Poco faltó para que la expresión fuera: “¡peor sería que no hubiésemos hecho nada!”.

El Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer se da en plena elaboración de las propuestas de presupuesto de egresos para el año siguiente, y el panorama parece que no cambiará.

Sobran las declaraciones de funcionarios involucrados, estatales y municipales, que afirman que el recurso para la atención de la Alerta de Violencia de Género no debe ser una partida específica, sino que las áreas deben destinar recursos con perspectiva de derechos y de género.

El artículo 4 de la Declaración, en su fracción h) dice textual que las autoridades deberán “consignar en los presupuestos del Estado los recursos adecuados para sus actividades relacionadas con la eliminación de la violencia contra la mujer”. No habla de “perspectiva de derechos y de género”.

Consignar, de acuerdo con la Real Academia Española, es “asentar en un presupuesto una partida para atender a determinados gastos y servicios”.

Si bien por la declaratoria de Alerta de Género no hay obligación de contar con partidas específicas en el presupuesto, un hecho es que a las omisiones que con optimismo reconocen para atender la violencia contra las mujeres se suma no tomar en cuenta principios de la Declaración como el mencionado.

Pero hoy es el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, día de actos y discursos políticamente correctos, que sólo hacen más visibles no sólo el flagelo que viven las mujeres potosinas, sino también el escaso compromiso de las autoridades para hacerle frente.

Skip to content