Carlos Rubio
Fue la noche del lunes 16 de marzo cuando la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP) anunciaba a través de un comunicado en redes sociales la suspensión de clases debido a la contingencia sanitaria de coronavirus Covid-19, y desde aquel día los estudiantes han pasado por complicaciones para poder continuar con sus estudios y concluir satisfactoriamente el semestre escolar.
En dicho comunicado, la UASLP escribía: Para dar cumplimiento a los distintos programas académicos, tanto de nivel medio superior, como de licenciatura y posgrado, podrán impartirse clases a través de diversos medios digitales, ya sea mediante la utilización de la plataforma Institucional de la Secretaría Académica o bien, por los medios que las entidades acuerden con su respectiva planta docente.
La UASLP daba a entender que los profesores se encargarían de cumplir por completo los programas académicos previstos, no obstante la realidad ha sido distinta.
Paola Márquez, estudiante de sexto semestre de la Facultad de Derecho, comenta que hasta el momento no lleva ninguna de sus clases en línea y ninguno de sus docentes se ha reportado para aclarar la situación académica en la que se encuentran tanto ella como sus compañeros. “Los temas de evaluación son inciertos, ninguno a dicho o hablado de ello”.
Miguel Bravo, estudiante de la misma carrera, lamenta que hasta el momento no lleva ninguna clase en línea, sus estudios se han limitado a enviar trabajos por correo electrónico. “La verdad frustra, porque las autoridades no dan señales de interés alguno por la situación, en especial resulta preocupante por la situación de los alumnos de décimo y de nuevo ingreso”.
El plazo de suspensión de clases estaba estimado hasta el 19 de abril, cuando terminaran las vacaciones de Semana Santa, sin embargo el 13 de abril anunciaron en un nuevo comunicado que el regreso a las actividades presenciales no se llevaría a cabo antes del 30 de abril y la situación cambiaría de acuerdo a las indicaciones de la Secretaría de Salud.
Debido a esto, la Facultad de Derecho publicó un tweet en donde se avisaba a los alumnos que el periodo vacacional había concluido y la contingencia sanitaria continua, por tanto “es necesario entrar en comunicación con sus profesores para continuar con los contenidos prográmaticos de sus materias (sic)”.
La incertidumbre es generalizada, ya que mientras las autoridades les piden a los estudiantes que busquen a sus profesores, pareciera que los docentes no quieren ser encontrados.
Por otro lado, también se encuentran los profesores que decidieron cumplir con su labor en otras facultades, como en Ciencias Químicas; Antonio Morales, alumno de tercer semestre, explicó que sus profesores se han estado comunicando con él, aunque en un principio sólo les solicitaron leer teoría y fue hasta que se dieron cuenta de que la contingencia se prolongaría, que comenzaron a encargar actividades y exámenes.
Consideró que se podría trabajar para tomar experiencia en el campo de las clases en línea y así aprovechar la situación para “que sea positiva y entonces se suponga que sabemos trabajar a distancia”.
De igual forma, Luis Ricardo López, de la Facultad de Ciencias de la Comunicación, consideró que sus profesores han estado realizando un correcto trabajo, ya que toma sus clases en línea y a la hora indicada en su horario. Sin embargo, se siente desilusionado ya que este era su último semestre en la UASLP y lo ha perdido por completo.
Es claro que en todas las facultades hay profesores que decidieron olvidarse de su semestre y de sus alumnos, como también hay quienes cargaron con la responsabilidad que se les otorgó desde que entraron y decidieron hacerse cargo de un grupo de estudiantes. Es evidente la libre cátedra que se otorga a los profesores al interior de la UASLP, sin embargo ¿cuál es el límite cuando de abandonar a sus estudiantes se trata?
