Angélica Campillo
La titular de los Servicios de Salud del Gobierno del Estado, Mónica Liliana Rangel Martínez, adelantó que, a reserva de que la Secretaría de Salud Federal lo confirme esta tarde, se prevé que San Luis Potosí vuelva a semáforo naranja a partir del próximo 26 de octubre debido al aumento de casos y hospitalizaciones por COVID-19.
En rueda de prensa, la funcionaria estatal comentó que todo lo que se ha estado trabajando esta semana respecto a los indicadores estarían indicando un incremento, como se ha venido observando, sobre todo en el número de casos y hospitalizaciones por COVID-19.
Destacó la recomendación del subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell respecto a volver a retomar medidas que disminuyan la movilidad y que permitan la distancia social, “en esto estaremos trabajando la tarde de hoy y para el día de mañana ya tendremos que tomar algunas decisiones contundentes en razón de evitar rebrotes que podrían ser inclusive doble o triple en razón del número de casos que en esta primera etapa de este COVID-19”.
En ese contexto, Rango Martínez manifestó que el estimado es que San Luis Potosí se ubique en semáforo naranja del 26 de octubre al 08 de noviembre, de riesgo alto, en razón de las evaluaciones, situación que hoy por la tarde se estará confirmando en la conferencia de prensa de la Secretaría de Salud Federal.
Apuntó que hay dos fechas relevantes que se tienen que ubicar dentro de este periodo: uno serían las celebraciones por el Día de Muertos y Xantolo, que seguramente son actividades que se tendrán que valorar debido a la concentración de población, ya que se sabe que esto incrementa el riesgo de contagio por coronavirus, sobre todo en las zonas metropolitanas.
Por su parte, el gobernador del estado de San Luis Potosí, Juan Manuel Carreras López aseveró que en caso de que se confirme el regreso a semáforo naranja y si no se toman medidas restrictivas en materia social y de prevención, inevitablemente van a resultar afectadas las actividades de carácter económico, “y ese es el peor escenario” por lo que hizo un llamado a todos los potosinos a hacer un esfuerzo de responsabilidad.
Señaló que con el cambio de semáforo se van a afectar actividades de carácter social y recreativo, que son los espacios donde se considera que está basado el alza en contagios por COVID-19 y por ende, el alza en hospitalizaciones, “los dos ejes más importantes que estamos tratando de salvaguardar, por una parte, la salud y la vida de las personas y, por el otro, su fuente de ingresos económica”.