Frater Ignatius
La tesela es una pequeña pieza de cualquier material, incluso vidrio que se utiliza para hacer un mosaico. Existe una tesela especial creada por el gran físico matemático y Premio Nobel de Física 2020, Roger Penrose, la cual posee dos formas geométricas que al colocarse una al lado de la otra, cubren un plano con un patrón que no tiene huecos ni superposiciones y que no se repite de forma periódica. Se pueden apreciar patrones de forma hexagonal de teselas en algunos pisos de baño muy simples. Las teselas de Penrose presentan una simetría rotacional de orden cinco, el mismo tipo de simetría que presenta una estrella de cinco puntas. Si giramos el diseño de la tesela a 72 grados, obtenemos el mismo diseño original.
Parece que el universo mismo se comporta en forma ordenada. Es decir, en figuras aparentemente desordenadas, casi siempre tienden a autoordenarse en una especie de recomposición de muchas piezas en una configuración o en varias. Da la impresión de que todo tipo de patrones van de un orden a un cierto grado de desviación de orden. Todo tiende a una repetición y con ello a una generación.
Gran parte de los científicos pensaban que los cristales basados en una simetría de orden cinco serían imposibles de crear, aunque desde entonces se han descubierto cuasicristales que se parecen a los patrones de teselas de Penrose y que presentan propiedades extraordinarias. Pueden utilizarse como antiadherentes o como supresores del calor. Diremos que un cuasicristal es una forma estructural ordenada pero no periódica.
En los años ochenta, se pensaba en la posibilidad de que la estructura atómica de algunos cristales pudiera basarse en una red no periódica, que no representara repeticiones periódicas. En 1982, Dan Shechtman descubrió una estructura no periódica en unas microfotografías de electrones de una aleación de aluminio con manganeso con evidente simetría de orden cinco que recordaba precisamente a una tesela de Penrose. El descubrimiento deslumbró tanto que algunos dijeron que era tan sorprendente como un copo de nieve de cinco lados. También se descubrió una tesela en el arte medieval islámico, cinco siglos antes que Penrose.
El pintor Alberto Durero había esbozado algunos montículos similares en la teselación rómbica. Otro detalle muy atrayente es que la teselación de Penrose, la secuencia de Fibonacci y la razón dorada están intrínsecamente relacionadas y probablemente deberían considerarse expresiones de un mismo fenómeno.