Letcia Vaca
La diputada Martha Barajas García presentó una iniciativa con la que propone que se prohíba y sea sancionado el arrojar colillas de cigarros en la vía pública, parques, áreas comunes, barrancas y en general en sitios no autorizados.
La legisladora propuso adicionar el artículo 10 de la Ley Estatal de Protección a la Salud de las Personas No Fumadoras, así como del artículo 107 de la Ley Ambiental del Estado de San Luis Potosí.
Por lo que quienes incurran en arrojar colillas en los lugares ya mencionados, podrían ser sancionados con una multa equivalente a entre 50 y 60 mil días de la Unidad de Medida y Actualización (UMA) vigente en el momento de imponer la sanción.
En la exposición de motivos, Barajas García mencionó que el material con el que están elaboradas las colillas de cigarros son “un enemigo silencioso para la naturaleza en general que perjudica al suelo, fauna, aire y agua. Según estudios, las colillas de cigarro contaminan más que un popote de plástico, además, uno solo de estos filtros contamina hasta 50 litros de agua potable o 15 litros de agua de mar”
Asimismo, al terminar estos residuos en la vía pública, también se convierten en en un foco de contagio del virus COVID-19, derivado de que “la persona fumadora, por la acción de inhalar o fumar su cigarro, pone sus labios en la colilla y ésta es arrojada al piso en donde el personal de limpieza, al realizar su trabajo, tiene que manipular o levantar ese residuo, por lo que se vuelve vulnerable a contraer el virus”.
