Angélica Campillo
Tanto el diputado de Morena, Cuauhtli Badillo Moreno, como el diputado adherido a Movimiento Ciudadano (MC), Mauricio Ramírez Konishi, se dijeron ganadores con el rechazo a la reforma electoral impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, en la Cámara de Diputados.
Para Badillo Moreno, el que la reforma electoral del presidente haya sido rechazada por no haber alcanzado la mayoría calificada, es “un golpe muy fuerte y muy bajo” para las y los mexicanos, ya que más del 85 por ciento de la población estaba a favor de la propuesta.
Según lo referido por el diputado morenista, con la reforma se buscaba que los recursos se reedireccionaran a donde más se necesitan, y con ello eliminar la burocracia dorada.
Además, acusó que la oposición se encargó de mentir y afirmar que se trataba de desaparecer al Instituto Nacional Electoral (INE), lo cual algunas personas creyeron, desafortunadamente.
El legislador aclaró que no están en contra de los órganos democráticos, sino en contra de las personas que tienen “secuestradas” a las instituciones, que viven en la opulencia, y que son indolentes con la mayoría de las y los mexicanos.
“Los diputados del PAN, del PRI, del PRD y de Movimiento Ciudadano votaron otra vez en contra de los mexicanos. Pero estos temas no los debemos de tomar como una batalla perdida hacia Morena, al contrario, ganamos más, porque logramos exhibir a los traidores de los intereses de los mexicanos”, argumentó.
A consideración de Badillo Moreno, afortunadamente existió el plan B y se logró legislar en materia electoral, para poder bajar los presupuestos de los partidos políticos; iniciativa que aseguró va a avanzar en el Senado, porque en esa instancia no se requiere la mayoría calificada.
Por separado, Ramírez Konishi calificó como un gran logro que no se haya aprobado la reforma electoral, ya que fue presentada de una manera inoportuna y provocadora en estos momentos.
Sin embargo, reprochó que se haya aprobado un “Frankenstein jurídico”, al que llamaron el plan B y como un atropello de todo procedimiento jurídico, ya que la iniciativa no se publicó en la gaceta, se obviaron trámites y no pasó a comisiones.
Para el legislador, la propuesta del presidente de la República refleja la intención visceral y de venganza del Poder Ejecutivo, al haber dado cuenta de que no tiene una mayoría en la Cámara de Diputados y que era una provocación la reforma constitucional en temas electorales.
Dijo que afortunadamente en el sistema republicano se tiene un Senado que revisará la propuesta, donde espera que se haga lo concerniente y “se detenga esa reforma tan grave” que se aprobó a las 4 de la mañana de ayer miércoles.
Ramírez Konishi apuntó que mediante esta reforma se pretende dejar inhabilitadas tres cosas: los tribunales, los organismos públicos locales electorales de los estados y la elección de los consejeros.
“Quisieron interponer un mecanismo burdo, que al final pone otra vez en entredicho y debilita nuestro sistema democrático. [Morena] quieren destruir la misma escalera con la que ellos llegaron al poder y no lo vamos a permitir”, finalizó el diputado.
