Abelardo Medellín Pérez
Dado que esta es la primera semana del año, en este espacio aprovecharemos para reponer las tradiciones de temporada y repasaremos esos 12 deseos políticos que hemos elaborado para extenderlos al espíritu del año nuevo, tomando en cuenta por igual algunas de las nuevas preocupaciones con las que nos recibieron los primeros días de este 2023.
Primera uva
Que el Gobierno del Estado ya no necesite la ausencia del gobernador Ricardo Gallardo Cardona para aplicar medidas serias, objetivas y preventivas contra la crisis sanitaria que representan los contagios de Covid-19 que han ido al alza y no han dado tregua. Si van a cancelar clases para posponer el regreso presencial, que lo hagan, pero no para ver si bajan los casos y así justifican sus próximos eventos masivos.
Segunda uva
Que en este 2023 el Gobierno del Estado encuentre razones y no excusas para solicitar sus créditos. Que no se vistan en el disfraz del “no pediré”, para ocultar su verdadera identidad de “lo necesitamos”. Claro, de vez en cuando los gobiernos deben pedir prestado, como los mil 500 millones que solicitó para ayudar al judicial y organismos descentralizados; no está mal, pero tampoco está bien que al mismo tiempo que niegan sus adeudos, continúen con el dispendio que son sus espectáculos masivos. ¿No sea han dado cuenta que cada que alguien pide algo en redes, el primer comentario es “yo no quiero Fenapo, yo necesito…”?
Tercera uva
Que el alcalde Enrique Galindo Ceballos deje de hacer cosas permitidas que parecen perniciosas. Luego de propuestas levanta-cejas como la de ponerle “PoliSÍa” a sus patrullas, queda claro que el alcalde capitalino necesita asesoría, pero gastar 4.3 millones de pesos en un asesor jurídico privado, puede hacer pensar mal y llegar a dos conclusiones: o esos 4.3 millones son repartidos después de pagados, o los más de 50 trabajadores del área jurídica del Ayuntamiento son los floreros más costosos de la Unidad Administrativa Municipal.
Cuarta uva
Que el Sistema Estatal Anticorrupción (SEA) de San Luis Potosí no sostenga el nombramiento de María Patricia Torres Rivera como parte del Comité de Participación Ciudadana. Un nombramiento que el Comité de Selección dio entre ocultamientos, una candidata única y un amparo promovido frente a un juez federal. El SEA ha permitido un nombramiento apócrifo y hasta ahora no ha hecho nada para reponer el proceso o retirarle el cargo a Torres Rivera. O termina con todas las decisiones del Comité de Participación Ciudadana sin efecto o termina con una investigación contra el secretario ejecutivo del SEA, Jesús Rafael Rodríguez López.
Quinta uva
Que el gobierno deje de jinetear y demonizar a sus trabajadores dentro del aparato burocrático. Si tienen responsabilidades de pago con ellos, como el de cualquier relación obrero-patronal, pagarles es tan imperativo como pagar una “beca alimentaria” o como sea que les digan a sus despensas. No, la burocracia no emprende paros y ocupaciones de calles por que odie al gobierno, la administración se sostiene justo por el trabajo de ellos y los comentarios ilusamente optimistas de “todos deberían trabajar 17 horas, como yo”, ni abonan, ni pagan, ni sirven.
Sexta uva
Que el gobernador ordene sus prioridades en un sentido humano y más empático. Todos nos tentamos el corazón cada que hay un caso de maltrato animal, es profundamente emotivo, entendemos por qué le conmueve tanto al jefe del ejecutivo estatal; pero esa preocupación contrasta fuertemente con aquellos comentarios en los que el gobernador raya en la revictimización y descalifica casos de desaparición intentando tildar todos de escapes voluntarios.
Séptima uva
Que la historia familiar y empresarial de la Gallardía deje de convertirse en la bolsa de contratación predilecta del gobierno. Que ya no haya casos como el de la directora Cobach, los trabajadores de la Oficialía Mayor o el de la dirección administrativa de la Secretaría Particular del Gobernador, en donde fue colocada una ex socia de aquella empresa infame por la que el gobernador enfrentó un proceso penal hace siete años. En 2015 Verónica Williams Méndez estuvo muy cerca del ejercicio de gobierno de Gallardo Cardona y este último fue sujeto a proceso. Aguas, gobernador, la historia no se repite, pero a veces rima.
Octava uva
Que alguno de los amigos poderosos de Enrique Galindo Ceballos le haga caso y por fin paguen los deudores industriales y comerciales que tienen entre 300 y 400 millones de pesos de cartera vencida con Interapas. El alcalde ya mostró ganas de querer cobrar, pero también de negociar; con eso dicho, no queda claro a quién convendrá más un acuerdo, lo cierto es que, mientras el usuario común adolece del servicio cada tanto y le espera este año un aumento en la tarifa, los grandes desarrolladores acceden al vital líquido sin liquidar sus pendientes con el organismo.
Novena uva
Que a la nueva magistrada presidenta del Supremo Tribunal de Justicia del Estado (STJE), Ma. Manuela García Cázares, no la sigan los fantasmas de su nepotismo pasado. Ya en 2016, quien entonces fue elegida como magistrada del Supremo Tribunal y hoy ocupa la presidencia, fue señalada por haber metido a familiares y cercanos al Poder Judicial. ¿Será que el tiempo y la experiencia le habrán enseñado a no volver a cometer esos abusos, o será acaso que llegó a dar motivos para que el gobernador acuse de “herencia maldita”?
Décima uva
Que un buen constructor y albañil construyan en el pecho de Leonel Serrato Sánchez, titular de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), una bodega. Para que ya no acuda a esa excusa gastada del “mi pecho no es bodega” para justificar sus comentarios ofensivos y desafortunados. Esta semana fue la magistrada con una innecesaria observación, pero ya en 2022 le tocó tizna al rector de la UASLP, Alejandro Zermeño Guerra, entonces, más que medir al ajeno, que mida sus palabras. El pez por su boca muere, y si no nos cree, que le pregunte a Rafael Aguilar Fuentes (Chiquilin).
Undécima uva
Que el Congreso del Estado pida a los reyes magos una nueva personalidad institucional que no sea la de “sirviente” o “ventanilla de trámite”, esas ya las vimos, no nos gustaron. Si vuelven a llamar a comparecencia, que sea para cuestionar; ya utilizaron las comparecencias de 2022 para aplaudir y pasar lista de quién está alineado, que aprovechen el 2023 para mínimo cuestionar las flagrantes omisiones en transparencia, los criticables excesos en agenda personal del gobierno y la incomprensible conversión de los apoyos sociales a esquemas de explotación electoral.
Duodécima uva
Paz, respeto y responsabilidad para y con las y los potosinos. Paz para las familias trastocadas por la violencia; aquella que es responsabilidad de otros estados, pero sigue dejando muertos frente a nuestras casas. Respeto con las víctimas directas e indirectas que, más que apoyo, en 2022 se les dieron muchas razones para mantener su exigencia de dignidad y justicia. Responsabilidad con esfuerzos como el del Mecanismo de Protección a Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas que por fin consiguió un presupuesto para este año, pero aún depende directamente del Gobierno del Estado.
Con las uvas y temas deglutidos no queda más que digerirlas, hacer sobremesa para sopesar y poner atención. ¡Feliz inicio de año!
Las opiniones aquí expresadas son responsabilidad del autor y no necesariamente representan la postura de Astrolabio.
Es Licenciado en Ciencias de la Comunicación y Maestrando en Estudios sobre la Democracia y Procesos Electorales en el posgrado de Derecho de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí. Ha trabajado como reportero y columnista en los medios digitales La Orquesta y Arco Informativo; actualmente es reportero de Astrolabio Diario Digital. Ha sido acreedor de dos premios estatales de periodismo en las categorías de Artículo de Fondo y Periodismo Regional.