Fernanda Durán
El Congreso del Estado aprobó una reforma a la Ley de Salud para que la Secretaría de Salud y el DIF estatal coadyuven en la implementación de programas de entrega de insumos de salud menstrual de manera gratuita, siempre que se tenga suficiencia presupuestal.
Con 23 votos a favor se adicionó la fracción II al artículo 133 de esta ley, para que las dos instituciones trabajen en la entrega de productos de higiene menstrual priorizando a la población con mayor grado de marginación y pobreza “con el fin de garantizar la seguridad sanitaria y el bienestar físico de las personas menstruantes”.
Además, se añadió la fracción VII BIS al artículo 4, la cual define los insumos de salud menstrual como: “todo objeto de contención utilizado durante la menstruación tales como: toallas higiénicas (descartables o reutilizables), tampones, copas menstruales, esponjas marinas, y ropa interior absorbente”.
La diputada Nadia Ochoa Limón señaló que el fenómeno de pobreza menstrual está íntimamente relacionado con las condiciones sociodemográficas, motivo por el cual se vuelve un asunto de salud e interés público.
Ochoa Limón refirió que si bien el DIF estatal ha implementado programas de apoyo de kits menstruales, la reforma pretende que los programas sean obligatorios para las siguientes administraciones.
“El Estado tiene un rol central para evitar que la menstruación sea un factor más de desigualdad, para ello es clave entender a la menstruación, no como un problema personal e íntimo, sino como una demanda que requiere respuestas desde la política pública”.
