María Ruiz
La familia de Bryan y Edgar, hermanos de 20 y 37 años de edad respectivamente, denunció que elementos de la policía del municipio de Soledad de Graciano Sánchez los golpearon para después lanzarlos a una de las cisternas de la planta tratadora El Morro, localizada a orillas del Río Santiago.
Los hombres fueron rescatados el pasado 24 de abril por elementos de Protección Civil de Soledad y la Guardia Civil Estatal, tras quedar atrapados.
Cuestionado al respecto, el secretario general del Ayuntamiento de Soledad de Graciano Sánchez, Ernesto Barajas Ábrego, se negó a emitir un posicionamiento y dijo que esperará a que “las autoridades se encarguen y deslinde si fue o no fue (…) que sí, hay señalamientos directos o indicios de elementos”.
Sumado a esto, Barajas Ábrego apuntó a que mientras se realizan los trabajos de investigación, la presidenta municipal, Leonor Noyola Cervantes, dio la instrucción de tener tolerancia cero a oficiales violentos dentro de la corporación municipal.
“La presidenta dio la instrucción de que en la corporación habrá cero tolerancia a situaciones de oficiales de violentos que atenten contra los derechos humanos o en algún momento infrinjan cualquier situación”.
Aunado a esto, el secretario general dijo que en el lugar donde sucedieron estos hechos se han presentado sucesos delictivos de manera cotidiana, pues se trata de una planta de agua abandonada, por lo que se investigará cómo fue que sucedió esta situación que ha denunciado la familia de los afectados.
“Insisto, vamos a esperar a ver qué arroja precisamente las investigaciones y qué determinan las autoridades investigadoras”, dijo.