Antonio González Vázquez
El Partido Acción Nacional celebró el 83 aniversario de su fundación con un escándalo: el alcalde de Matehuala, Iván Noé Estrada Guzmán, fue acusado mediáticamente de presuntos vínculos con el crimen organizado.
Fue la cereza del pastel del octogenario blanquiazul.
Desde hace un mes, el panista empezó a tomar forma de impresentable al ser relacionado con redes de traficantes de migrantes e incluso con el consumo de drogas.
El jueves circuló en redes sociales un par de audios en los que presuntamente se le escucha ponerse a las órdenes de grupos delictivos: “pienso jugármela porque yo te dije que soy transparente y jalo con el cártel. Lo que el cártel me diga, aquí está. Y lo que ellos merezcan, aquí está”.
Mientras el audio del presidente municipal tomaba tintes de escándalo desde la tarde del jueves hasta el viernes, el líder nacional del blanquiazul, Marko Cortés Mendoza enviaba una felicitación al panismo potosino por el aniversario: somos la mejor opción para las elecciones del 2024, se aventuró a afirmar.
En contraste, la prensa nacional y local difundía la noticia que revelaba los probables nexos del edil panista con la delincuencia organizada.
En un mes, Matehuala se convirtió en el centro de atención de la opinión pública y medios de información en el país y no necesariamente para bien.
Desde el día 4 de abril en adelante, el mundo empezó a derrumbársele a Estrada Guzmán.
Todavía el jueves, horas antes de que se conocieran los audios, en la “mañanera”, el presidente Andrés Manuel López Obrador al hablar del tema de los migrantes, señaló que en Matehuala “tenemos problemas con el secuestro de migrantes, secuestros de la delincuencia organizada”.
El incidente ocurrido en plena semana santa colocó a Matehuala en el mapa nacional como territorio de operación de redes criminales dedicadas al tráfico ilegal de personas.
En esos caóticos días, Estrada Guzmán y su policía municipal pasaron a ser parte sospechosa, de modo que una de las primeras líneas de investigación de la Fiscalía General del Estado, se dirigía al propio ayuntamiento.
El 11 de abril, en un operativo sorpresivo coordinado por la Secretaría de la Defensa Nacional y Guardia Civil Estatal, detuvieron al director de la policía municipal, Francisco Eduardo Moreno Rosales, así como a tres elementos en activo por presunta posesión de drogas localizadas en las oficinas de la corporación.
Tras los hechos, Estrada Guzmán emitió un posicionamiento público en el que en su parte sustancial expuso lo siguiente: “no negamos nuestra responsabilidad como autoridad municipal de evitar que Matehuala sea utilizado como estación de grupos delictivos que obtienen ganancias controlando el tráfico de personas”.
El día siguiente, el alcalde envió un mensaje a la ciudadanía: “ya sabemos que en los últimos días ha habido rumores, ha habido por ahí publicaciones, pero yo quiero decirles que Matehuala es chico y todos nos conocemos, todos y cada uno sabemos quiénes somos y a qué nos dedicamos”.
Y agregó: “ustedes saben, la guerra sucia en la política por ahí hay dos personas que no son de Matehuala y les duele mucho que Matehuala esté creciendo, que haya regresado la gobernabilidad y el respeto, por ahí nos están calumniando, nos están difamando en mi persona, pero yo quiero decirle a la gente de Matehuala que yo estoy dispuesto a un examen toxicológico, lo que sea porque…si consumiera cualquier sustancia tóxica yo andaría con un tenis de un color y de otro corriendo como loco por las calles.”
Parecía que todo quedaría ahí, pero no fue así, pues el gobernador ya había sentenciado que “Matehuala es un desmadre”.
Había urgido al edil que pusiera orden o en su caso, lo haría el gobierno.
A como están las cosas, parece que ese amago se está llevando a la práctica: la Fiscalía General del Estado tiene abiertas dos carpetas de investigación contra el presidente municipal porque hay indicios de vínculos con los traficantes de migrantes y por los audios.
Astrolabio dio cuenta la semana anterior en una nota informativa del hecho de que, en el arranque de la entrega dedespensas del Programa de Becas Alimentarias del gobierno estatal en Matehuala, no se corrió invitación al alcalde.
La relación institucional está rota.
Estrada Guzmán salió a desmentir el contenido de los audios a los que insertó en una “guerra sucia” en su contra impulsada por el diputado Alejandro Segovia, uno de los más cercanos al mandatario estatal.
No se puede sustraer el tema de su arista política.
En la medida que se vayan acercando las elecciones de junio del año entrante habrá más escándalos.
Lo que resulta ser muy grave, es que temas tan sensibles como el de la seguridad pública, la violencia y el tráfico de migrantes, se utilicen con fines políticos a través de filtraciones sobre hechos no verificados ni confirmados.
El caso del hallazgo de 139 migrantes que habían sido secuestrados en Matehuala es ahora utilizado con aviesas intenciones político-partidista-electorales.
El alcalde matehualense atraviesa un momento crucial y parece estar acorralado en un callejón sin salida. La Fiscalía definirá su futuro. No sin antes consultarlo con el gobernador pues se trata de un tema de gobernabilidad de Matehuala.
Una gobernabilidad que en dicho del mandatario es inexistente pues afirmó que ese municipio es un “desmadre”.
Para Acción Nacional el asunto tiene un impacto brutal, pues mientras intentan vender la idea de ser la mejor opción para las y los potosinos, el presunto involucramiento de uno de los suyos en actividades criminales viene a derrumbar cualquier estrategia de posicionamiento partidista.
Matehuala es tierra caliente con un asunto candente como el secuestro de migrantes y la presunta presencia de organizaciones criminales a las que, según los audios, apoya Estrada Guzmán.
El llamado “triángulo de las Bermudas” podría hacer desaparecer al ayuntamiento con la ayuda de la Fiscalía y el gobierno estatal.
Las opiniones aquí expresadas son responsabilidad del autor y no necesariamente representan la postura de Astrolabio.
Es Licenciado en Ciencias de la Comunicación por la Universidad Autónoma de San Luis Potosí. Ha sido docente de la Facultad de Ciencias de la Comunicación durante 25 años. Además, durante 30 años se ha desempeñado como periodista en medios como El Heraldo, El Mañana de Ciudad Valles, Pulso, Milenio San Luis, Diario Digital San Luis, Librevía, La Jornada, Global Media y actualmente en Astrolabio Diario Digital y Periodismo Político.com. También ha sido corresponsal de medios nacionales como Agencia de noticias Notimex, La Jornada y Milenio.
