Frater Ignatius
James Mill educó a su superdotado hijo en varios campos del conocimiento. A los tres años de edad aprendió el griego y ayudaba a su padre en escritos sobre economía política a principios de su adolescencia. Antes, a los ocho años de edad, ya había asimilado a varios clásicos griegos en su idioma original. En relación con la historia, ya leía asiduamente muchas obras de la disciplina. A los doce años estudió la lógica escolástica y los tratados lógicos de Aristóteles. Conocía ya a los quince años a los clásicos latinos y comenzó a estudiar a Adam Smith y David Ricardo.
Mill estuvo viviendo en Francia un año, en donde asimiló rápidamente la cultura gala. Continuó estudios en diferentes disciplinas del saber como la química, zoología, lógica y un curso de matemáticas avanzadas. A su regreso sufrió una crisis mental que lo dejó postrado un buen tiempo. Tal vez se debió al régimen estricto de su padre que lo presionaba para que estudiara febrilmente y casi sin aliento.
Nuestro filósofo de marras, fue miembro del Partido Liberal, en donde propuso varias reformas al sistema electoral. Fue amigo de Alexander Bain.
Cerca de la mediana edad sufrió de una profunda depresión. No obstante, salió a la luz su primer libro, Un sistema de lógica, una obra reconocida como pilar dentro de la filosofía de la ciencia.
En 1851 y luego de una larga amistad, Mill se casa con Harriet Taylor, una mujer también superdotada que le ayudó mucho en sus trabajos y le amplió totalmente la visión en cuanto al buen trato a las mujeres. Lamentablemente, después de siete años de matrimonio, Taylor muere por problemas pulmonares.
Mill fue rector de la Universidad de St. Andrews y miembro del Parlamento de Westminster. También apadrinó al filósofo y matemático Bertrand Russell.
Mill creía en la libertad en donde el individuo debe tener la capacidad de hacer lo que desee a menos que cause daño a otros. Las personas poseen criterio y lógica para tomar decisiones sobre su propia felicidad. El gobierno solo debe interferir cuando se trate del cuidado y la protección de la sociedad. Murió de erisipela en Aviñón, Francia.
Las opiniones aquí expresadas son responsabilidad del autor y no necesariamente representan la postura de Astrolabio.
Es Licenciado en Administración y Maestro con especialidad en Educación por el Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey. Amante de la cultura, la filosofía, la literatura, el cine y las matemáticas. Gusta de leer y escribir sobre historia, psicología y filosofía.
