María Ruiz
Luego que la presidenta de la Federación Universitaria Potosina (FUP) de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP), Miroslava Giselle González Sánchez, se manifestó junto con otros alumnos y denunciaron violencia política de género por parte de la Rectoría, la Defensoría de los Derechos Universitarios da seguimiento a estos señalamientos.
La titular de esta área, Urenda Queletzú Navarro Sánchez, explicó que estas denuncias públicas ya fueron investigadas y no configuran como acciones de violencia política en razón de género, pese a que la agraviada señaló un presunto maltrato de directivos y consejeros que le han impedido realizar sus gestiones como presidenta.
“Se manifestó una inconformidad de carácter académico sobre la cual nosotros podemos mediar, mas no tener una intervención relativa, y sobre otras denuncias, concretamente que la presidenta las señalaba, estas acciones, como acciones de violencia política en razón de género y algunas otras, honestamente no configura, y eso lo digo con mucho respeto a la presidenta”.
Navarro Sánchez enfatizó en que por parte de la Rectoría no hay una falta de transparencia, como lo expuso la presidenta de la FUP el 31 de octubre.
Aclaró que esta inconformidad surge porque González Sánchez solicitó información de datos personales y de carácter confidencial, que en apego a la Ley de Protección de Datos, la UASLP no puede brindarle.
“También decía que nos había hecho una solicitud de información, yo como lo referí a ella durante una sesión informativa que tuvimos ayer con el Consejo Directivo Universitario, no podíamos proporcionarle la información que me solicitó, toda vez que yo tengo prohibición por ley de transferir datos de carácter personal”.
Por último, la titular de la Defensoría de los Derechos dijo que darán seguimiento a las problemáticas que enfrentan el alumnado de la Facultad del Hábitat, quienes también denunciaron al secretario general Omar Nahúm Pérez Pozos, de abuso de poder.
“Nosotros podemos fungir siempre como lo ofrecemos, como mediadoras o como mediadores, entendemos que es un uso del espacio y ahí es importante decir que nuestro Estatuto Orgánico le otorga la facultad a las y los directores de disponer el orden y la disciplina de los espacios universitarios, por lo tanto, le corresponde a la directora de esta Facultad dirimir esa controversia”.