Abelardo Medellín
La Comisión Estatal del Agua (CEA) y el gobernador Ricardo Gallardo Cardona se deslindaron de la determinación emitida por juez federal que ordena a las autoridades estatales y municipales se coordinen para atender la crisis que padece la Presa San José.
La semana pasada, el Segundo Tribunal Colegiado en Materia Administrativa del Noveno Circuito resolvió dentro del amparo en revisión 366/2019, que la CEA, el gobernador, el Interapas y la Secretaría de Ecología y Gestión Ambiental (Segam), deben coordinarse durante los próximos 30 días para crear un programa conjunto que garantice la protección al medio ambiente, impida la contaminación del agua salubre y evite la reproducción del lirio acuático en la Presa San José.
Al respecto de esta determinación judicial, el gobernador Gallardo Cardona negó que como Gobierno del Estado les competa tratar el tema.
“Nosotros vamos a tratar de apoyar en todo lo que podamos. Sin embargo, son obligaciones de quienes están a cargo de las presas; nosotros la Presa San José no la tenemos, no somos responsables… si podemos ayudar, lo vamos a hacer”, señaló.
Mientras que el gobernador se deslindaba del ordenamiento judicial, la CEA emitió un comunicado titulado “Presa San José, responsabilidad del Ayuntamiento de San Luis: CEA”, en el que aludió que no tiene autoridad para intervenir el embalse, además de que se busca “evitar un conflicto en las atribuciones de cada soberanía”.
Aunque en el comunicado el director de la CEA, Benjamín Pérez Álvarez, no menciona si acatará el mandato judicial, sí hizo promoción de obras del Gobierno del Estado, como la rehabilitación de la presa El Peaje.
Además, la CEA compartió capturas de pantalla del Sistema de Seguridad de Presas, en el cual aparece la tarjeta informativa de la presa San José y en esta se específica que el organismo encargado de su manejo es el Gobierno Municipal de San Luis Potosí.
De acuerdo con la información oficial, la presa San José fue construida en 1903 y tiene una capacidad de almacenamiento original de 10 millones de metros cúbicos de agua, mismos que se han reducidos a cuatro millones de metros cúbicos actualmente debido al problema del lirio y el azolve.
