Por Victoriano Martínez
La crisis por falta de agua no existe y sólo es un invento de políticos que quieren crear una psicosis colectiva para vender una solución falsa, porque el agua nunca se va a acabar, lo que hay es una mala gestión del agua por parte de autoridades ignorantes e irresponsables, coincidieron en señalar los participantes en el foro Agua: Problemática y soluciones.
El encuentro, organizado como acto de presentación del Centro Potosino de Estudios Políticos y Sociales Dr. Salvador Nava Martínez (CPEPS), se realizó la noche de este jueves 25 de abril en el patio de la casa que habitó el Doctor Nava, en Arista 1080.
La antropóloga Giselle Iveth Barajas Ruiz describió la forma en que uno de los problemas del agua que se consume en San Luis Potosí se refleja en los dientes de los habitantes de la ciudad por el exceso de flúor.
Consideró que al establecer políticas públicas se descuida el aspecto social de los problemas y el caso del agua potable ocurre igual, además de que se aplican técnicas manipuladoras en las que se suelta un problema para enseguida ser quienes ofrecen la solución.
El doctor Sergio Castillo Zaragoza, previo a plantear tres alternativas de solución de corto, mediano y largo plazo, estableció tres premisas para definir el problema: (1) ya existe tecnología suficiente para potabilizar las aguas residuales, (2) el agua es selectiva, no es la misma en todas las regiones y (3) el agua nunca se va a acabar.
Estimó que el problema para encontrar soluciones al abastecimiento del agua potable a la población tiene que ver con el objetivo para el que se nombra al director del Interapas, porque si no se enfoca en la solución integral del servicio, es ahí donde nace el problema.
Señaló que la falta de un plan hídrico municipal, alineado con uno estatal y ésta con el plan hídrico nacional representan otro de los problemas que generan deficiencia en la gestión del agua.
Calificó como una farsa la campaña a favor del ahorro del agua porque esa no es la vía para resolver la crisis de abastecimiento porque, en todo caso, la s cifras que mencionan sobre el agua con la que se cuenta abren la opción a una solución muy rápida.
Castillo Zaragoza calculó que, si del agua disponible al 74 por ciento se le da uso agrícola y sólo al14 por ciento urbano, bastaría con trasladarla de un uso al otro para resolver el problema, pero es algo que resulta inviable. Planteó tres soluciones.
La primera tiene que ver con el intercambio de agua de uso industrial, para que las empresas usen agua tratada, con excepción de las industrias de alimentos y de producción de medicamentos.
Mencionó que en 1995, cuando se inició la construcción de la Plata de Tratamiento de Aguas Residuales de Tanque Tenorio, se firmó una carta de intención en la que el gobierno estatal se comprometió a entregar a la CFE agua tratada a cambio de reponer al Estado lo que se extraía de 21 pozos.
Mencionó que el gobierno estatal cumplió su parte, pero la CFE no y no hubo quien lo reclamara porque el grupo directivo de la Comisión Estatal del Agua que lo promovió salió con el cambio de gobierno y quienes llegaron ni conocían el compromiso y luego ni les interesó. El compromiso sigue vigente, dijo, y se podría contar con hasta 16 millones de metros cúbicos.
Como una segunda solución, de mediano plazo, mencionó la posibilidad de mezclar agua de primer uso con agua residual tratada con técnicas que permiten su potabilización para consumo humano.
Castillo Zaragoza mencionó que esa técnica ya es utilizada en Namibia, Singapur, California, Texas, Gran Bretaña y otras partes del mundo, y para ser utilizada aquí se tendría que hacer una modificación a la ley para que se autorizara una mezcla con el 30 por ciento de aguas residuales tratadas para consumo humano.
Expuso que esta medida respondería además al problema que representaría inyectar más agua a la red para una población mayor que tendría como consecuencia la generación de mayor volumen de aguas residuales que tendrán que ser tratadas.
A largo plazo, dijo Castillo Zaragoza, se puede considerar la opción de traer agua del Río Pánuco, que nace en San Luis Potosí y del que Nuevo León, Tamaulipas y Veracruz ya contemplan tomar agua para uso urbano.
Agustín de la Rosa Charcas, por su parte, criticó la poca seriedad de las autoridades estatales y municipales para tratar el tema del agua, que los lleva a, por ignorancia y corrupción, mentir con ligereza.
Como ejemplo mencionó que se aprovecharon del problema de la presa El Realito para decir que 300 mil potosinos se quedarían sin agua, según el alcalde Enrique Galindo Ceballos, y 400 mil habitantes, según el gobernador Ricardo Gallardo Cardona. Señaló que usan el tema del agua para hacerse propaganda, pero no para buscar soluciones.
De la Rosa Charcas calculó, a partir del agua que se inyectaba a la red proveniente de El Realito y luego de descontar la que aseguran que se fuga en la red, el problema provocado por la falta de agua de esa presa afectaría a 82 mil 192 habitantes, si se toma en promedio un consumo diario de 250 litros por persona.
Señaló que no se trata de que existe una falta de agua, sino de que se encuentra pésimamente administrada, lo que representa una negligencia criminal.
Mencionó como un problema adicional dejar que la ciudad crezca al interés de grupos empresariales, lo que es un indicador más de que nos e toma en serio el tema, lo que ha provocado que se hayan cerrado espacios para las recargas naturales, lo que provoca inundaciones en la ciudad.
Propuso que en la Sierra de San Miguelito se construyan presas de gaviones para que frenen la fuerza del agua y se generen terraplenes en los que se de una reforestación natural de esa área.
De la Rosa Charcas señaló que se ha abusado de manera insostenible del acuífero profundo, que cada año disminuye de tres a cuatro metros, porque salen 150 millones de metros cúbicos y no se logra recargar ni la mitad.
Mencionó que ese abatimiento del acuífero es el que provoca que ahora se resientan los sismos, además de que se han identificado 112 grietas recorren la ciudad y destruye viviendas y calles.
El foro Agua: Problemática y soluciones es el primero que organiza el CPEPS, que anunció para las próximas semanas el siguiente con el tema de seguridad.