Fernanda Durán
La Comisión de Ecología del Congreso del Estado no ha tenido ninguna sesión en lo que va del año mientras carga con el obstáculo de un reciente cambio de asesor, la licencia del diputado presidente Eloy Franklin Sarabia y el rezago de más de dos años para la emisión de una nueva Ley Ambiental en el Estado.
Aunque la Comisión ha agendado un par de reuniones en los últimos meses, estas han sido canceladas, por lo que la mesa integrada por los diputados Juan Francisco Aguilar Hernández, Lidia Nallely Vargas Hernández y Miguel Ángel Segura Méndez, ha violado el Reglamento para el Gobierno Interior del Congreso del Estado.
Lo anterior, debido a que el artículo 149 ordena a las comisiones y comités reunirse cuando menos una vez al mes para tratar los asuntos que les sean turnados por la Directiva en los periodos ordinarios, o por la Diputación Permanente en los recesos del mismo.
Solamente en el mes de febrero estuvieron registradas en la agenda del Congreso dos reuniones: el 23 y 28 de febrero, ambas canceladas. Situación que se repitió este jueves 23 de mayo.
Mientras que en el mes de abril el Poder Legislativo informó sobre alguna reunión virtual de la comisión, sin que esta se haya hecho pública.
El mismo artículo 149 establece que sólo en el supuesto de epidemias, peligro de invasión, caso fortuito o fuerza mayor en el país o en el estado, podrán celebrar reunión en forma no presencial, mediante video conferencia, trabajo a distancia, o medios virtuales análogos que permitan la comunicación simultánea, debiendo acordar los mecanismos y tiempos para recabar la firma autógrafa de dictámenes que se hayan aprobado, o de acuerdos adoptados.
Una de las tareas de la Comisión con el retraso más importante es la Ley de Ecología estatal, pues desde hace dos años se comenzaron las mesas de trabajo para este proyecto, pero hasta ahora no se ha llegado a un resultado. A pesar de que el entonces presidente de la Comisión, Eloy Franklin Sarabia resaltaba la necesidad de su actualización debido a que contaba con 25 años de retraso.
Asimismo, una de las personas que llevó ese trabajo por casi dos años, el asesor Fausto Gómez Pérez, ya no forma parte de la comisión legislativa, y tanto el proyecto como el resto de temas por resolver quedaron bajo una nueva asesoría a sólo cuatro meses de que termine la legislatura.
