María Ruiz
La crisis hídrica en el Barrio de San Miguelito ha dejado a los residentes luchando por acceder al agua potable. Las obras de rehabilitación realizadas por la Secretaría de Desarrollo Urbano, Vivienda y Obras Públicas (Seduvop) han complicado aún más la situación al impedir que las pipas y camionetas con bidones lleguen a las viviendas.
La alcaldesa de la capital, Alexandra Cid González, expresó su preocupación ante la situación, pues los habitantes de la zona no solo enfrentan la escasez de agua, sino también la falta de acceso para recibir el servicio en sus hogares.
Actualmente, más del 80 por ciento de los afectados reciben abastecimiento mediante bidones que llegan hasta sus puertas. Sin embargo, un 20 por ciento aún no puede acceder al recurso de manera adecuada y tienen que llenar tina por tina.
“Les acercamos los bidones o las pipas lo más que podemos para que llenen sus tinas y puedan trasladar el agua a sus hogares”, explicó Cid González.
Por su parte, Felipe de Jesús Contreras Negrete, encargado de despacho de la Dirección de Gestión Ecológica y Manejo de Residuos, quien lidera una campaña para abastecer a la población que vive en las calles afectadas por las obras del Barrio de San Miguelito, dijo que la visión es proporcionar apoyo para sus necesidades básicas.
Sin embargo, las restricciones de acceso debido a las obras en construcción han dificultado la distribución a través de la red de suministro.
“Dialogamos con los habitantes para comprender sus necesidades. Aunque algunas calles son inaccesibles para camionetas y bidones, nuestras cuadrillas de apoyo de la Secretaría de Bienestar recorren la zona para abastecer a quienes lo necesitan, llevándoles agua hasta por medio de tinas”.
Explicó que en un día típico, una pipa de 20 mil litros se distribuye durante el turno matutino en las calles afectadas. Además, algunos vecinos acuden al punto de abastecimiento con sus propios recipientes.