Jaime Nava
Que el organismo operador del agua en la zona metropolitana de San Luis Potosí, es decir, el INTERAPAS, esté pasando por su peor momento financiero es lo de menos; podría ser la institución más eficiente de todo el país y, aún así, quienes llevan años promoviendo su desintegración, hoy seguirían intentando convencernos de que esa es la mejor alternativa para mejorar la distribución y suministro de agua.
El agua es un mero pretexto; en el fondo, lo que se busca con la desintegración del INTERAPAS es que cada municipio se haga cargo de la expedición de factibilidades de agua y saneamiento, requisito indispensable para que se puedan construir viviendas, locales, centros comerciales y edificios.
Por eso, quienes se han dedicado a cosechar propiedades a cambio de este tipo de autorizaciones, son los que intentaron, quieren y seguirán buscando que el territorio de Villa de Pozos, zona donde se concentra buena parte del crecimiento inmobiliario en la capital, se convierta en un municipio más, que seguramente terminarán controlando y, por lo tanto, beneficiándose de la tramitología y el silencio de los desarrolladores.
Aunque juega a ser “oposición” y aspira a convertirse en el próximo candidato a gobernador de los partidos -suenan risas grabadas- contrarios al gobierno estatal, en los hechos, Enrique Galindo Ceballos, se ha comportado como un empleado más de su vecino de enfrente. Por eso, durante su campaña hizo suya la desaparición del INTERAPAS y la ofreció como una propuesta original.
Por eso, no resulta extraño que surjan comunicados de prensa como el que circuló esta semana atribuyéndole la responsabilidad respecto del crecimiento del lirio acuático en la presa San José al Ayuntamiento de la capital y al INTERAPAS. Claro que es su responsabilidad; sin embargo, el tono del comunicado más que informar algo en concreto, pretende exhibir a los funcionarios municipales con párrafos como:
“Sin embargo, y no obstante que los integrantes del comité multidisciplinario han hecho saber por unanimidad a los representantes del Ayuntamiento la obligación que por ley les compete a ellos y a Interapas de solucionar o aminorar la proliferación del lirio acuático en la Presa de San José, ejecutando acciones como limpieza y desazolve, han expresado de manera rotunda su negativa, pues en todas las reuniones sostenidas, Martínez Castillo y Reyes Montante, han manifestado desconocer los documentos y normativa a través de los cuales se desprende dicha responsabilidad.”
Un par de días tardó en llegar la respuesta del alcalde quien, según otro comunicado y después de tres años de haber gobernado la capital y formar parte del consejo de INTERAPAS, se aventuró a declarar:
“En el Gobierno Municipal hay voluntad política plena. Puse el lirio como una prioridad, tenemos el equipo completo y recursos disponibles. Estamos listos, y si lo hacemos bien, puede convertirse en un modelo nacional”.
¿A poco sí? Ni la burla perdonan. En realidad el lirio se convirtió en prioridad gracias a un amparo que promovió la asociación civil Cambio de Ruta y la propuesta de acción para remediar el problema del lirio fue elaborada por investigadores y especialistas del Instituto Potosino de Investigación, Ciencia y Tecnología (Ipicyt).
Galindo intenta apropiarse de la narrativa; pero, al final, ya sabemos quién le va a quitar el crédito.
Las opiniones aquí expresadas son responsabilidad del autor y no necesariamente representan la postura de Astrolabio.