María Ruiz
La noche del martes 6 de agosto, la capital potosina fue escenario de tensos enfrentamientos entre conductores de Uber y taxistas, lo que provocó un caos vial en diversas partes de la ciudad.
Al respecto, el alcalde de la capital, Enrique Galindo Ceballos, afirmó que su administración sólo intervino para gestionar el tema de vialidad y que estos conflictos deben resolverse a través del diálogo.
“De los taxis y los Uber nosotros no tenemos nada que ver más que el tema de la vialidad. Cuando ellos infringen, estuvimos ahí atentos. Eso es lo que yo les puedo decir. Hubo un gran conflicto extendido, no sólo en un punto, y desde luego esperamos que ese tipo de cosas se resuelvan dialogando”, declaró Galindo Ceballos.
A pesar de la intervención de la policía vial municipal para tratar de controlar la situación, el gobernador Ricardo Gallardo Cardona señaló su frustración por la ausencia de una acción más decisiva por parte de las autoridades.
Ante esto, el edil señaló que había observado la presencia efectiva de la Policía Municipal durante el altercado.
De igual modo, indicó que revisaría las declaraciones del gobernador, pues los reportes de la policía municipal confirmaban su presencia en el lugar.
“No es un evento delictivo, no es un evento de delincuencia. Es un evento de dos grupos con intereses particulares y no era un tema estrictamente de violencia hacia los ciudadanos, sino un tema entre ellos”, explicó Galindo Ceballos.
El conflicto, que comenzó fuera de San Luis Potosí y se extendió hasta la lateral de la carretera 57, no fue considerado un caso de inseguridad pública, sino un enfrentamiento entre particulares, según el alcalde.
Galindo Ceballos hizo hincapié en la necesidad de diálogo y de la intervención de las autoridades correspondientes, más allá de la municipal, para resolver la disputa.
“Vimos videos donde taxistas agreden a conductores, y yo considero que debemos ser llamados a una reunión de trabajo para prevención, contención y reacción ante lo que esté sucediendo”, finalizó.
