María Ruiz
El Gran Fondo Nairo Quintana regresará a San Luis Potosí el próximo 1 de diciembre, marcando su tercera edición. Este año, la inscripción será gratuita y se entregarán mil jerseys sin costo para los participantes en un esfuerzo por hacer más accesible el evento.
Aunque esta estrategia busca ampliar la participación, el monto de inversión pública para la organización aún no ha sido aclarado por el alcalde Enrique Galindo Ceballos.
Pese a que a pregunta expresa se le requirió al presidente municipal informar el presupuesto invertido, se limitó a comentar que los detalles sobre el recurso destinado a este evento, así como la derrama económica generada, se darán a conocer una vez que concluya.
En su edición 2022, el Ayuntamiento de San Luis Potosí destinó al Gran Fondo Nairo un presupuesto total de 2 millones 853 mil 600 pesos. Esta información se brindó a través de la solicitud de información con folio 240474422000043, presentada por Astrolabio Diario Digital.
Las ediciones pasadas y sus costos de inscripción
Desde su primera edición en 2022, el Gran Fondo ha cobrado cuotas de inscripción que oscilan entre los mil 200 y 2 mil 500 pesos. Esta estructura tarifaria fue modificada en la edición de 2023 al reducir los costos para incentivar la participación y garantizar una mayor derrama económica, que en esa edición alcanzó los 25 millones de pesos, según cifras oficiales.
Aunque la inscripción gratuita en 2024 representa un beneficio directo para los ciclistas, persiste la duda de cómo se cubrirán los gastos asociados al evento como logística, seguridad y promoción.
Impacto en la ciudad y falta de detalles financieros
El Gran Fondo Nairo ha sido catalogado como un evento con impacto positivo en el turismo y la economía local, según palabras del mismo presidente municipal, ya que según sus registros atrae a participantes de diversas partes de México y otros países, quienes suelen pernoctar en la ciudad y aprovechar los servicios locales.
Sin embargo, la ausencia de un desglose detallado de la inversión pública genera cuestionamientos sobre la transparencia en el uso de recursos, especialmente cuando el evento se posiciona como una inversión para proyectar a San Luis Potosí en el ámbito deportivo y turístico.