Carl Gustav Jung

El Yo se realiza en la muerte. 1875-1961.

Frater Ignatius

Este genio suizo es considerado también filósofo en toda la extensión del término. A diferencia de su amigo y mentor Freud, Jung exploró muchos caminos vedados para el vienés. Además, estaba en contra de ponerle a todo una etiqueta de naturaleza sexual como en la represión,

Amplió el inconsciente de una forma muy provechosa y rica en varios ámbitos. Introdujo en su psicología profunda muchas áreas en ocasiones aparentemente inconexas, por ejemplo: la arqueología, la mitología, las artes, la religión, la arqueología -él mismo siempre quiso ser arqueólogo- la filosofía, la música, etc…

Jung argumentaba que la psique humana posee una variedad de matices casi imposibles de discernir y que conviene más al momento de analizar una mente, estar preparado en muchos campos para intentar entender lo que subyace a la problemática psicológica.

Acuñó vocablos y conceptos que ahora forman parte no solo de la psicología o de la filosofía sino también de las artes, del cine, la literatura e incluso la ciencia. Jung al igual que Freud, pretendió elevar su disciplina a la categoría de ciencia, pero haciendo la clara observación de que la psicología es mucho más que una ciencia e incluso defendió fenómenos llamados paranormales. Él mismo de joven fue testigo de varios hechos inexplicables en los campos de las ciencias exactas.

Los conceptos como; introvertido, extrovertido, arquetipo, psicología analítica o profunda, inconsciente arquetípico o colectivo, transformación, sincronicidad, libido extendida, individuación, todos forman parte de un lenguaje que ha impregnado muchas actividades humanas.

Los problemas de la mente humana deben resolverse por medio de una serie de disciplinas y conceptos englobados en la psicología. La psicología a manera de Freud no es reduccionista ni exacta. La psicología por ello es analítica, porque pretende desentrañar las neurosis, las psicosis, las esquizofrenias, los trastornos obsesivos compulsivos, las depresiones, colocándolas en una dimensión que pueda ser analizada y luego curada de forma exitosa.

Sabemos que el inconsciente es incognoscible. Por eso lo llamamos inconsciente. No obstante, por medio de sus expresiones nos podemos dar cuenta de los problemas que vive un ser humano; el Otro, con todo su universo en sí mismo, con toda su complejidad. Jung hizo mucho por comprender a esa criatura extraña y misteriosa que es el Hombre, con h mayúscula, incluyendo por supuesto a la mujer.

Las opiniones aquí expresadas son responsabilidad del autor y no necesariamente representan la postura de Astrolabio.

Es Licenciado en Administración y Maestro con especialidad en Educación por el Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey. Amante de la cultura, la filosofía, la literatura, el cine y las matemáticas. Gusta de leer y escribir sobre historia, psicología y filosofía.

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