Estela Ambriz Delgado
Como parte de los compromisos hechos por el titular de la Procuraduría Agraria a nivel federal, Víctor Suárez Carrera, respecto a las problemáticas en la materia en San Luis Potosí, se realizará una investigación a detalle de las condiciones financieras y de tenencia de la tierra en que las inmobiliarias llevaron a cabo la urbanización de lo que era el ejido Garita de Jalisco, a fin de evitar que se repita la situación en el resto de la Sierra de San Miguelito.
El colectivo Guardianes de la Sierra consideró que uno de los asuntos que llamó la atención del procurador fue la historia de la Garita de Jalisco, el primer ejido que se privatizó en el país bajo el modelo de las inmobiliarias ejidales, las cuales en el año 2019 se establecieron como una figura ilegal e inviable.
Esta situación fue expuesta durante la reunión previa al recorrido por diferentes núcleos agrarios y descendientes de ejidatarios del lugar, quienes señalaron la forma irregular en que los empresarios se apropiaron de sus tierras para urbanizar a partir de 1992, donde se enclava el Centro de Convenciones, el Poder Judicial Federal, el Tecnológico de Monterrey y otras instituciones de élite, así como el Club y el Campo de Golf La Loma, entre otros.
En este sentido se explicó a Suárez Carrera la tendencia de la expansión inmobiliaria desde la década de los 90, y la forma en que hoy pretenden conectar con el proyecto Las Cañadas de la empresa “Espacios en el Horizonte”, por lo que la amenaza de seguir desdoblando desarrollos de élite sobre la Sierra de San Miguelito siempre ha estado latente.
En lo expuesto al funcionario, se estableció que las sociedades mercantiles de la Garita de Jalisco se impusieron sobre la sierra en el año 2000 con un cambio de uso de suelo municipal; en 2003, con un cambio del Plan de Desarrollo Urbano de la capital de San Luis Potosí, estas sociedades que abarcan casi mil hectáreas se apoderaron del patrimonio de entre 80 y 100 familias, y además detonaron una opulencia económica y política que actualmente se sigue observando.
En este sentido, Guardianes de la Sierra advirtió al procurador del riesgo que representa que, en los programas de desarrollo urbano aprobados durante la administración municipal encabezada por Xavier Nava Palacios, se hayan declarado 527 hectáreas como urbanizables dentro de las mil 805 hectáreas que los empresarios pretendieron excluir del Área de Protección de Flora y Fauna Sierra de San Miguelito, para construir Las Cañadas.
Ante la situación, el procurador agrario dijo que se llevará a cabo una investigación a detalle de las condiciones financieras y de tenencia de la tierra en que dichas sociedades mercantiles se apropiaron de las tierras de lo que antes era el ejido Garita de Jalisco, a fin de tener un marco de referencia que ayude a evitar que esto se repita en el resto de la sierra.
