María Ruiz
El alcalde capitalino, Enrique Galindo Ceballos, defendió el dictamen que propone un incremento en la tarifa de los parquímetros para el próximo año, incluido en la Ley de Ingresos 2025.
Según explicó, esta medida es parte de un ajuste necesario para mantener los servicios municipales, aunque la propuesta aún deberá ser aprobada en sesión de Cabildo y posteriormente por el Congreso del Estado.
El edil destacó que el ajuste en la tarifa de parquímetros no debe percibirse como un impuesto, sino como un “derecho discrecional” para quienes opten por estacionarse en la vía pública.
“El que quiere usa el parquímetro y lo paga, y el que no quiere se estaciona en otro lugar. Es totalmente opcional para el ciudadano”, señaló.
El edil agregó que desde hace años no se ha actualizado esta tarifa, por lo que esta es una oportunidad para adecuarla a las necesidades actuales.
“Todo el mundo piensa que de los parquímetros se pagan cosas como bomberos, pero es un ingreso pequeño. Esto es solo un ajuste razonable, y los estacionamientos privados en el Centro Histórico son mucho más caros y aun así están llenos”, enfatizó.
El alcalde también explicó que la Ley de Ingresos que se presentará próximamente se diseñó bajo un enfoque “moderado”, al tomar en cuenta los desafíos presupuestales y el impacto de medidas como el rescate de pozos de agua.
Subrayó que, aunque la administración municipal tiene cálculos financieros sólidos, el Congreso del Estado tendrá la última palabra para aprobar o modificar los ajustes propuestos.
Entre las novedades mencionadas para el próximo año no solo se contempló el costo de la tarifa de los parquímetros, sino también un posible cobro por el derecho al alumbrado público, práctica que dijo es común en muchas ciudades de México.
“No es un impuesto, es un derecho. El Ayuntamiento gasta más de 120 millones de pesos anuales en alumbrado, y esta medida aligerará esa carga. Estamos hablando de cantidades mínimas, como 80 centavos bimestrales por casa, que se prorratearán entre más de 400 mil cuentas”, explicó.
En este sentido, Enrique Galindo defendió las decisiones presupuestales al destacar que la actual administración ha priorizado la obra pública como nunca antes.
“Tenemos 52 obras en proceso solo este mes, y cerraremos el trienio con casi 200 obras realizadas. Esto es gracias a una buena administración honesta y transparente”, afirmó.
Finalmente, el alcalde confió en que tanto el Cabildo como el Congreso entenderán la necesidad de estos ajustes, pues cada ingreso adicional será destinado a fortalecer los servicios municipales y la infraestructura de San Luis Potosí.
“El reto es equilibrar las finanzas sin impactar significativamente a los ciudadanos, y estoy seguro de que el esfuerzo vale la pena para el desarrollo de nuestra ciudad”, concluyó.
