María Ruiz
Amparo Rosillo, presidenta de Nuestro Centro, señaló que hay una falta de claridad sobre el destino de los recursos generados por los parquímetros del Centro Histórico y la necesidad de una mayor participación ciudadana en la vigilancia de su uso.
Lo anterior al pronunciarse respecto a la propuesta de aumento en la tarifa de los parquímetros, dentro de la Ley de Ingresos para el ejercicio fiscal 2025 del Ayuntamiento de San Luis Potosí.
“De los parquímetros, un porcentaje debería ir directamente al Centro Histórico, pero desconozco si realmente se ejerce de esa manera porque no ha habido transparencia desde administraciones pasadas. Lo que sí puedo reconocer es que, durante la gestión de Xavier Nava, se publicaba afuera de Palacio Municipal lo que ingresaba y lo que se ejercía. Sin embargo, no quedó del todo claro si esos recursos realmente se destinaron como se indicaba”, apuntó Rosillo.
La presidenta de Nuestro Centro enfatizó en la importancia de la participación ciudadana en los comités encargados de supervisar estos fondos.
“Entre más involucrada esté la sociedad civil en estos procesos, mejor podríamos cuidar nuestra ciudad y asegurar que los recursos se usen en beneficio de la sociedad”, declaró.
En cuanto a los problemas que afectan al Centro Histórico, Rosillo señaló que el comercio informal sigue siendo un desafío significativo, así como la falta de mantenimiento y problemas sociales como la drogadicción.
“Estos temas no son exclusivos del Centro Histórico, son problemas que afectan a muchos otros lugares y reflejan un mal de la sociedad en general. No se trata solo de responsabilidades de las autoridades, sino también de un compromiso colectivo”, explicó.
Asimismo, Rosillo destacó que la informalidad económica es un factor que agrava estas problemáticas.
“Cuando una economía no genera el empleo suficiente, las personas buscan formas de obtener ingresos como sea. Esto es lo que debemos evitar, fomentando una economía formal que brinde bienestar a la sociedad”.
La presidenta reiteró el llamado a las autoridades y a la sociedad para trabajar de manera conjunta en soluciones estructurales que permitan atender las necesidades del Centro Histórico.
Por último, consideró que, con una mayor transparencia en la administración de los recursos y un enfoque integral hacia la mejora de las condiciones sociales, podrá lograrse un entorno más digno y funcional para toda la ciudadanía.