Antonio González Vázquez
Sin notificarle formalmente su remoción, Lidia Argüello Acosta fue “relevada” del cargo como representante del Partido Acción Nacional (PAN) ante el Consejo Estatal Electoral y de Participación Ciudadana (Ceepac). La ex candidata a la dirigencia estatal lamentó que el blanquiazul va hacia un “cacicazgo”.
El pasado domingo en asamblea del Consejo Estatal, Verónica Rodríguez Hernández fue reelecta en la presidencia del Comité Directivo Estatal. El proceso se encuentra impugnado en todas sus fases por el cúmulo de irregularidades cometidas por el grupo encabezado por la senadora.
Luego de que Argüello Acosta denunció públicamente las irregularidades observadas antes y durante la asamblea, el Comité Estatal decidió destituirla como representante legal del partido ante el órgano electoral que la ex aspirante desempeñaba desde 2022.
El pasado miércoles publicó un mensaje en sus redes sociales. Un lacónico: “Hoy, dejo lo que más me apasiona…” y lo acompañó con una fotografía desde su lugar en la mesa de plenos del Consejo General del Ceepac, en la que aparece en primer plano el logotipo del PAN.
Algunos de sus seguidores que comentaron la publicación le externaron su solidaridad y apoyo, e incluso varios entendieron que se trataba de la renuncia al partido.
Argüello Acosta aclaró que no piensa renunciar a su militancia de más de 30 años y que el mensaje se relaciona con su relevo como representante del PAN ante el Ceepac. Subrayó que ni siquiera piensa en abandonar a la institución pese a haber sido víctima de los excesos de la dirigencia reelecta.
“No dejo al PAN, sigo siendo panista, no llegué al PAN por intereses ni ambiciones personales como si lo hacen otros”, precisó.
Dijo que el Comité no le informó de su relevo, sino que se enteró de manera indirecta al enterarse que fue eliminada de un chat de los representantes de los partidos ante el órgano electoral. “No tienen dignidad”, criticó en referencia al grupo que controla al partido.
“Con el paso de los años he tratado con muchas dirigencias estatales, pero sin duda la actual es la peor de todas”, indicó tras afirmar que continuará dando la batalla para limpiar la elección.
Adelantó que en caso de que el Tribunal Electoral del Estado ratifique a Rodríguez Hernández, recurrirá a la Sala Regional de Monterrey y de ser necesario, a la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.
Censuró que en la elección interna hayan “ganado los pesos y no los votos genuinos de las y los consejeros”.
Hubo tantas anomalías que bien se puede afirmar que “está vez se brincaron la barda”.
Concluyó que su partido se encamina a un cacicazgo con miras a colocar al partido en manos de un grupo afín al gobernador José Ricardo Gallardo Cardona, a quien durante los últimos tres años el PAN “no lo ha tocado ni con el pétalo de una rosa”.
