El Catalejo es el resultado de las mentes desorientadas de los reporterillos de Astrolabio Diario Digital
El manejo que dio la Fiscalía General del Estado al caso de la desaparición de Daniela Martell Orozco fue desafortunado, pero no sólo por las inoportunas versiones que difundió sobre los hechos, sino porque exhibió la desprotección en la que se encuentran los habitantes del Estado y de la ciudad, especialmente las mujeres, ante la indolencia de quienes ofrecieron que se podría vivir sin miedo y quien llegó para servir y proteger. Manuela García Cázares como una fiscal que los mismo dice una cosa que dice otra. Por su parte, el gobernador Ricardo Gallardo Cardona y el alcalde Enrique Galindo Ceballos optan por hacer oídos sordos y mutis cuando lo que están a prueba –no superada, por cierto– son sus estrategias de seguridad, que no representan ni prevención, ni combate, ni justicia.
