La cuota sangrienta de los criminales

Antonio González Vázquez

Liquidar, matar, eliminar, asesinar, ejecutar es algo que hacen muy a menudo los criminales y con ello, siembran el terror; lo ensombrecen todo sin el Estado, sus instituciones, corporaciones y personal policíaco los contenga. Exterminan vidas con una facilidad pasmosa irrumpen violentamente en una vivienda y matan, vigilan a su víctima en cualquier calle o avenida, se aproximan y la ejecutan, persiguen a su objetivo en camioneta, auto o motocicleta, la cierran el paso y lo acribillan con eficacia espeluznante. Esto ocurre con una frecuencia inadmisible, así lo refleja el nuevo relato de esta crónica de ejecutados.

Presuntos delincuentes fuertemente armados a bordo de un vehículo no identificado persiguieron a un hombre que guiaba un Versa de color guinda por calles de la colonia San Pablo, municipio de la capital. Le disparaban durante el trayecto hasta que hirieron a la víctima que perdió el control y fue a chocar contra una vivienda de la calle San Bonifacio donde falleció por las balas que lo alcanzaron. Los hechos, aproximadamente a las siete de la tarde del 26 de enero.

En un predio cercano a las vías del ferrocarril México-Laredo, tramo colonia Matamoritos, municipio de la capital, fueron hallados los restos en descomposición de un hombre no identificado. Personal de la Fiscalía General del Estado trasladó el cuerpo al Servicio Médico Legal a fin de identificarlo, así como las probables causas de su muerte. El hallazgo, por la tarde del 26 de enero.

Sujetos armados asesinaron a un hombre en el umbral de una bodega en la calle Legumbres en la Central de Abastos, municipio de la capital. El cuerpo ultimado quedó sentado de espaldas a una pila de arpillas de cebollas. El crimen, por la tarde del 28 de enero. Los asesinos huyeron del lugar de los hechos en la motocicleta en la que habían llegado.

En la comunidad Cerrito de Rojas, municipio de Ahualulco, unos vecinos que andaban cerca de un hoyanco descubrieron el cuerpo de un hombre con disparo de arma de fuego en la cabeza. Dieron aviso a la policía. El hallazgo, aproximadamente a las nueve de la mañana del 30 de enero.

Por la mañana del 2 de febrero, policías de la capital que realizaban un recorrido por el fraccionamiento Providencia y de casualidad se percataron de que una persona yacía en el suelo de un lote enrejado entre las calles Roma y Francia. Se acercaron al sitio y resultó que se trataba de un hombre no identificado que presentaba diversas heridas por armas de fuego.

Un hombre de 30 años de edad murió por la mañana del 5 de febrero en el Hospital Central. Había sido internado 48 horas antes del deceso víctima de heridas provocadas por armas de fuego; fue agredido por sujetos armados en la calle Venustiano Carranza en la cabecera municipal de Soledad de Graciano Sánchez.

Un cuerpo en avanzado estado de descomposición fue descubierto a eso de las diez horas del 6 de febrero en un arroyo bajo el puente Birmania, municipio de Ciudad Valles; un paisano que paseaba por la zona denunció el hallazgo. Elementos de la Guardia Civil Estatal acudieron al sitio solo para confirmar el suceso.

En un predio de la comunidad Palma de la Cruz, municipio de Soledad de Graciano Sánchez fue localizado el cuerpo de un hombre no identificado. Sus victimarios le prendieron fuego en un terreno de la calle Circuito Palma del Río. El hallazgo, luego de que padres de la familia de la Escuela Heroínas Mexicanas avisaron a la policía que había un incendio cerca del plantel y que el humo era pestilente. Los hechos, alrededor de las nueve de la mañana del 6 de febrero.

En una nopalera de la comunidad Rancho Nuevo, municipio de Soledad de Graciano Sánchez, unos jornaleros que se dirigían a una parcela se encontraron un cuerpo arrumbado entre el polvo muy cerca de la carretera que conduce al Aeropuerto Ponciano Arriaga. Elementos de la Guardia Civil Estatal arribaron al lugar donde confirmaron que se trataba de un varón de edad indeterminada que presentaba tres heridas por disparos de arma de fuego. El crimen, por la mañana del 6 de febrero.

Habitantes de Los Arbolitos reportaron a la policía el hallazgo de restos humanos incinerados dentro de una ruinosa vivienda abandonada en la entrada de esa colonia en la capital del estado. A eso de las siete de la tarde del 9 de febrero, al pasar por el lugar percibieron un olor fétido y al entrar al cascajo de la casa encontraron el cuerpo, mismo que fue recuperado por personal del Servicio Médico Legal para su identificación.

Una mujer de 39 años de edad fue asesinada con arma blanca en el interior de su casa en la colonia Fray Juan de Zumárraga, fraccionamiento Villa Real de Santiago en el municipio de Ciudad Valles. El cuerpo fue descubierto por la tarde del 12 de febrero, cuando una familiar entró a la habitación de la víctima que yacía en el piso donde se desangró por la gravedad de las heridas recibidas.

En el atardecer del 13 de febrero unos transeúntes que cruzaban el puente Los Reyitos sobre el bulevar del Río Santiago descubrieron los restos de un hombre que yacía junto a un poste del alumbrado público. Elementos de la Policía de Investigación acudieron al sitio donde confirmaron que el varón de unos 30 años de edad y que no identificado fue asesinado a golpes.

Una riña entre los sujetos de oficio peluqueros derivó en un crimen en la colonia Hogares Populares Pavón, municipio de Soledad de Graciano Sánchez. Los peluqueros empezaron a discutir en la esquina de la calle del Agua con avenida del Valle, a unos metros de una barbería. De súbito, uno de los sujetos sacó una pistola y le disparó reiteradas veces a su rival y de paso, hirió a una mujer que acompañaba a la víctima. Los hechos, hacia el mediodía del 13 de febrero.

Dos individuos armados ingresaron a un local de venta de discos musicales y DVD de películas piratas y asesinaron con armas de fuego al comerciante encargado del establecimiento, ubicado en la calle San Ángel a espaldas del templo de El Saucito, en la capital del estado. El crimen, a eso de las siete de la tarde del 13 de febrero.  

Un joven de 23 años de edad caminaba por la calle Prolongación Ecuador de la colonia San Francisco, municipio de Soledad de Graciano Sánchez, cuando fue atacado por sujetos armados que transitaban por esa vía a bordo de una motocicleta. A lugar llegaron los paramédicos para brindar auxilio al herido, pero murió víctima de cuatro impactos de bala. El crimen aproximadamente a la una de la tarde del 14 de febrero.

Un hombre no identificado de unos 30 años de edad fue asesinado a golpes por una presunta turba que lo linchó en la colonia Maya Mil, municipio de la capital. El presunto ladrón fue descubierto durante la mañana del 15 de febrero atado a un paradero del transporte urbano. Sus agresores lo habían inmovilizado con hule adherente. Unos transeúntes dieron aviso a la policía y a la Cruz Roja, los paramédicos lo trasladaron urgentemente al Hospital Central donde finalmente falleció víctima de la brutal golpiza recibida.

En el interior de una vivienda ubicada en la calle Precursores de la colonia Campestre, municipio de Ciudad Fernández, fue localizada una mujer que fue asesinada con arma blanca. El hallazgo lo hizo una hermana que fue a visitarla por la mañana del 16 de febrero; la mujer de unos 40 años de edad recibió múltiples tajos de cuchillo o navaja. La Fiscalía General del Estado reportó la apertura de una carpeta de investigación bajo protocolo de presunto feminicidio.

A eso de las nueve de la noche del 16 de febrero, un hombre que conducía un automóvil sedán rojo por la calle Moctezuma en la cabecera municipal de Villa de Arista, fue acribillado a tiros por sujetos armados que lo atajaron a bordo de otra unidad. La víctima de 40 años de edad, era originario de ese municipio y fue identificado por sus familiares.

Presuntos ladrones asesinaron a un hombre de la tercera edad en la colonia Tercera Grande, municipio de la capital. Durante la madrugada del 18 de febrero, ingresaron sigilosamente a una vivienda en la calle Cruz Colorada para realizar un atraco, pero se les opuso el inquilino de 66 años de edad, por lo que cargaron a golpes en su contra hasta matarlo. El cuerpo fue hallado por uno de sus hijos cuando acudió a visitarlo, pues vivía solo.

Entre los matorrales secos de un predio de la comunidad Arroyos, delegación municipal La Pila, unos paisanos que cruzaron por el lugar descubrieron un cuerpo humano en estado de putrefacción. Avisaron a la policía capitalina que a su vez dio vista a la Fiscalía General del Estado que, a través del Servicio Médico Forense, deberá identificar el sexo de la víctima. El hallazgo, a las dos de la tarde del 19 de febrero.

La degradación en la convivencia social es ilimitada, de modo que entre amigos se pueden matar, tal y como sucedió en la colonia Segunda de Plan de San Luis en la zona del periférico norte, municipio de la capital: un grupo de amigos bebían en la vía pública y en la medida en que se embriagaban, empezaron a discutir airadamente; fue entonces cuando uno de los jóvenes acabó con la vida de uno de sus compañeros al abatirlo a tiros de pistola. La víctima y el presunto asesino, apenas de 20 años de edad.

Una mujer y un hombre de unos 25 años de edad fueron abatidos a tiros en la sala de su casa en el fraccionamiento San Isidro, municipio de Soledad de Graciano Sánchez. Aproximadamente a las 14 horas del 21 de febrero, los presuntos se introdujeron a una vivienda de la calle San Agustín y al ver a sus víctimas abrieron fuego. Los asesinos, al parecer dos, habían llegado al lugar a bordo de una motocicleta y tras el crimen huyeron.

A eso de las nueve de la mañana del 22 de febrero, fue descubierto el cuerpo de un hombre no identificado asesinado con arma blanca. Unos vecinos que caminaban por un camino de terracería de la comunidad San José del Barro, encontraron los restos y luego dieron aviso a la policía. El cadáver estaba tirado boca abajo a un lado del camino y presentaba múltiples heridas por objeto punzo cortante.

Un hombre de 42 y su sobrino de 24 años de edad conversaban en una vivienda del Barrio La Cofradía en la cabecera municipal de Rioverde. Eran alrededor de las diez de la noche del 21 de febrero cuando irrumpieron civiles armados que abrieron fuego; el tío de oficio comerciante murió en el lugar y su sobrino fue trasladado a un hospital víctima de varias heridas de proyectil.

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