María Ruiz
Luego de la polémica generada por las denuncias contra Lidia Vargas Hernández, directora de la Instancia de las Mujeres en Villa de Pozos, la defensora de derechos humanos Sofía Rodríguez criticó la falta de una postura clara por parte de Morena, donde milita la funcionaria, y que esta ha desviado el debate al exponer públicamente a una víctima de violencia.
Rodríguez destacó que, en su reciente video, Vargas Hernández evitó responder sobre la acusación central en su contra: el intento de colocar a su esposo, Mario N., en un cargo público a pesar de contar con antecedentes y una sentencia por tentativa de feminicidio.
“No menciona en ningún momento la gravedad de los señalamientos. En cambio, intenta desviar el foco atacando a otras figuras políticas, pero esto no responde a la demanda de las colectivas”, expresó la activista.
Además, Rodríguez advirtió que la exposición de la víctima Isabel en el video de Vargas constituye un acto de revictimización que puede generar graves consecuencias sociales y emocionales.
“No solo la exhibe, sino que también minimiza las dificultades que ha enfrentado para obtener justicia. Esto es victimización secundaria y una muestra clara de que la Instancia de las Mujeres no está funcionando como debería”, afirmó.
Sobre la actuación de la funcionaria, la defensora enfatizó que Vargas Hernández no dimensiona la gravedad de su conducta y la responsabilidad que implica su cargo.
“Si realmente estuviera del lado de las víctimas, no las expondría de esta manera ni usaría su testimonio para limpiar su imagen. Su obligación es garantizarles acceso a la justicia, no ponerlas en riesgo”, subrayó.
La activista también criticó la falta de funcionamiento de las instituciones municipales en Villa de Pozos, donde la atención a la violencia de género no ha sido una prioridad.
“No hay un reglamento claro, no hay protocolos de atención y, lo más preocupante, no hay voluntad para corregirlo. Estamos viendo una administración improvisada que no ha dado respuestas”, denunció.
Rodríguez hizo un llamado a Morena para que asuma responsabilidad sobre los perfiles que permite en la función pública.
“El partido debe fijar una postura clara, porque los involucrados son gente de Morena y esto compromete su discurso sobre la lucha contra la violencia de género. También es importante conocer la posición de Rita Ozalia Rodríguez, presidenta estatal del partido, sobre la permisividad de estos perfiles en la política local”, enfatizó.
Finalmente, la activista insistió en que este caso debe ser un punto de inflexión para revisar los protocolos de las instancias municipales y la injerencia de la Secretaría de las Mujeres en estos temas.
“No es un hecho aislado; situaciones similares han ocurrido en otros municipios. ¿Cuántos casos más se necesitan para que las instituciones dejen de ser cómplices?”, concluyó.
