Ciudad de México (21 de enero de 2016).- Un sacerdote fue sorprendido golpeando en la cabeza a cada uno de los niños que fueron a recibir su bendición al altar de su iglesia.
Durante una misa, el padre zapeaba a sus feligreses más pequeños para hacerlos ‘creyentes más fieles’.
Una grabación hecha con un teléfono móvil revela la forma poco ortodoxa de impartir las enseñanzas de la Biblia a los más jóvenes.
En fila, cada uno de los niños recibió su dosis de golpes en la cabeza antes de retirarse hacia el cobijo de sus padres, quienes, sonrientes, aceptaron las prácticas del párroco.
https://www.youtube.com/watch?v=P2Iar2TJLFU
Fuente: Excélsior.