Los reporterillos de Astrolabio Diario Digital echamos un vistazo al pasado y en esta sección le presentamos uno de nuestros hallazgos.
En los últimos años, que los gobernadores se conviertan en blanco de acusaciones por grandes desfalcos está dejando de ser una novedad. Por lo menos son 11 los señalados, con más de uno abiertamente prófugo de la justicia.
De 2010 a la fecha, los ex mandatarios señalados por actos de corrupción y que son investigados por la Procuraduría General de la República por desvío de recursos públicos y enriquecimiento ilícito son:
Javier Duarte de Veracruz
Roberto Borge de Quintana Roo
Guillermo Padrés de Sonora
César Duarte de Chihuahua
Ángel Aguirre de Guerrero
Fausto Vallejo de Michoacán
Jorge Herrera Caldera de Durango
Miguel Alonso Reyes de Zacatecas
Rodrigo Medina de Nuevo León
Egidio Torre Cantú de Tamaulipas
Rubén Moreira de Coahuila
Entre ellos, destacan los de Veracruz, Quintana Roo, Chihuahua, Durango, Tamaulipas, Nuevo Léon, Sonora y Coahuila, quienes, de acuerdo a un reporte de SinEmbargo.com, incrementaron en 186 mil 535.7 millones de pesos el monto de sus respectivas deudas con relación a la que recibieron al llegar al poder.
Historias de saqueos que, desde siempre, parecen acompañar la vida pública de este país. La nota localizada esta semana corresponde a El Monitor Republicano del 2 de diciembre de 1884, un día después de que Manuel González entregaba el poder a Porfirio Díaz. El Sr. Peña, quien dejó el cargo de Ministro de Hacienda, es el protagonistas de lo que entonces les parecía unaudito… Parece que hoy la actuación de los políticos en cargos públicos no deja de ser inaudita. Este es el recorte:
EL ATENTADO DEL SÁBADO.- La Semana Mercantil comenta de esta manera el escándalo inaudito que cometió el ex ministro de Hacienda, Sr. Peña, en la oficina de contribuciones:
“¿De qué palabras seremos capaces para comentar este atentado inaudito? ¿Qué diremos al pueblo ante cuyos ojos se ha consumado?
El déspota ha cerrado la puerta de su sendero público entre el escándalo de la sociedad.
¡Qué espectáculo!
Los empleados defendiendo con pistola en mano los fondos del Distrito, con pistola en mano, como se defiende del asaltante, y el Ministro con fuerza armada sacándose esos fondos!
Este gobierno tuvo que arrojar a última hora la máscara que le quedaba, y decir: “Aquí estoy con la bayoneta en la mano. ¿Se creía que no se pagaba a los empleados por falta de fondos? Pues mirad, me llevo el Haber de esos empleados.”
“Por qué de ser lícita, siquiera pasable, no se comunicó la orden de entrega de ese dinero con las formalidades, o al menos con las fórmulas de quien, en un átomo, se respeta y se estima.
¿Por qué se presentó el Sr. Peña con fuerza armada, intempestivamente, a sacar ese dinero?
Lerdo, cuando partió huyendo, extrajo los fondos de Palacio, pero sin escándalo y en momentos de revolución, y esta acción es la más negra, la más infamante de que se le acusa en sus últimos días.
Este gobierno, dejando su puesto en plena paz, da este escándalo al público sólo por aprovechar los últimos momentos.
¡Comparad!!
Ni el tiempo de que disponemos, ni la trascendencia de este hecho, ni las restricciones de la ley de imprenta nos permiten en estos momentos comentarlo extensamente.
Ni él ni la sociedad lo necesitan.
¡Quiera Dios volver sus ojos de piedad hacia este pobre país, que no hay humillación ni atentado que no haya sufrido!
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Ya veremos como todo esto queda impune, lo mismo que todos los abusos de la administración gonzalista.
Fuente: https://news.google.com/newspapers?nid=aK62MiYD7mUC&dat=18841202&printsec=frontpage&hl=es