Mucho espacio se ha dedicado en los medios de comunicación a las gestiones municipales de la zona metropolitana de San Luis Potosí, sea porque los alcaldes fueron postulados no sólo por el mismo partido, el de la Revolución Democrática PRD, sino porque tienen su origen en un mismo grupo político, el que encabezan Ricardo Gallardo Juárez y su hijo, José Ricardo Gallardo Cardona.
Yo mismo he dedicado varias colaboraciones al periódico Pulso de San Luis en donde escribo los sábados, y aquí en Astrolabio los lunes; los temas son variopintos y a veces han provocado reacciones, por ejemplo un militante de la izquierda potosina señaló que mis preguntas sobre hacia dónde se dirigían y qué les había pasado a los dos Gallardo eran falsamente ingenuas. Debe usted saber que cuando le pregunto algunas cosas en mis publicaciones de opinión no es porque no tenga una respuesta, sino que pretendo mover a la reflexión en torno a ella, o porque estoy totalmente seguro que usted ya tiene su propia respuesta y será la mejor.
Se ha culpado, yo mismo lo he hecho, a los jefazos de las dos comunas de realizar toda clase de cosas al margen de su mandato democrático, de estar construyendo una plataforma electoral a través de los programas de asistencia a la gente pobre, regalando trastes para cocina, agua en garrafones, tortillas, útiles y uniformes escolares, becas y demás; un importante grupo de comerciantes en la vía pública se ha confrontado directamente con el gobierno capitalino porque éste ha arremetido en su contra, descalificando a los líderes y negándose en redondo al diálogo; y la cereza del pastel ha sido el informe que el Gobierno del Estado presentó en materia de seguridad pública y en el que da cuenta con el incremento brutal de los indicadores para San Luis Potosí y Soledad, ambos gobernados por los Gallardo –regencia de por medio de parte del ingeniero Gilberto Villafuerte en Soledad, pero ese es otro tema– dando a entender cierta complacencia, permisividad o complicidad de parte de ellos para con los malos.
El debate en torno a los modos y fines de los comerciantes de pollo y demás cárnicos, hoy líderes soledenses y gobernantes capitalinos, continuará, porque ellos se dedican mañana, tarde y noche a solidificar su movimiento, y sus adversarios a querer detenerlos… oiga… ¿de verdad sus adversarios se dedican a querer detener a los Gallardo? La verdad es que no.
Mire Usted, veamos quiénes son los regidores de “oposición” a los alcaldes capitalino y soledense:
En San Luis Potosí, panistas, César Augusto Contreras Malibrán, Laura Gama Bazarte, Enrique González Hernández, Marcela Zapata Suárez del Real y Raymundo Roberto Ramírez Urbina; Por el PRI, David Mauricio Alanís Córdoba y Leticia Lozano Martínez.
En Soledad de Graciano Sánchez, panistas, María de la Luz Mata Carrizales y Delfino Mendoza Rodríguez; del PRI, Luis Manuel Bernal Martínez; del Partido Verde, Araceli Martínez Acosta; y de Morena, Luis Alberto Huerta Milán.
¿Ha oído Usted de ellos? O sea, desde luego que muchos sabemos quiénes son, de dónde vienen, cuáles fueron sus méritos y cuáles sus alianzas internas en cada partido para ser favorecidos con el puesto de regidores, me refiero a que si como regidores de los ayuntamientos de San Luis Potosí y Soledad de Graciano Sánchez ha usted oído hablar de su trabajo, de su quehacer cotidiano de representación de los intereses de la minoría.
Algunos panistas en el ayuntamiento capitalino sí que han destacado, pero por apoyar al presidente municipal, los otros porque sólo han guardado silencio, hacen mutis, o expresan que no los toman en cuenta, o que les niegan información.
Los regidores del PRI, David Alanís y Luis Bernal, quizás hayan sido un poco más combativos en cada municipio, pero sólo un poco, no se imagine Usted que están dejando el físico y corriendo gravísimos riesgos por su desempeño opositor, acaso hacen alguna observación puntual, eventualmente intervienen en las sesiones del Cabildo, y excepcionalmente promueven alguna medida o demandan información por los canales legales y hasta llegar a los tribunales.
Salvo unas dos o tres excepciones, usted póngales el nombre, porque seguramente puedo llegar a equivocarme, todos parecen haber sido postulados por el movimiento de Ricardo Gallardo Juárez y su hijo, José Ricardo Gallardo Cardona, porque no se atreven ni siquiera a cuestionar sus modos de andar, muchísimo menos a ir más lejos.
¿Será que de verdad viven un aislamiento en el ayuntamiento, y que los periodistas les ignoran por alguna razón indebida, o será que no les apura en lo más mínimo generar controversia con los nuevos dueños de San Luis y Soledad?
¿Acaso los partidos políticos no les dan alguna directriz sobre cómo posicionarse frente a ciertas decisiones de los presidentes municipales?
Me parece que en todos los casos hay un incorrecto ejercicio de la función de Estado para la que fueron electos los llamados regidores de “representación proporcional”, pues cuando no aplauden, asienten, y cuando se oponen son tan relajados, suaves y comedidos que no se notan.
Los partidos designan los regidores para colocar en esa chamba a algún incondicional o para asegurar alianzas internas en sus partidos que les permitan una sólida candidatura, pero todos sabemos que hay partidos que no tienen oportunidad alguna de ganar, esos sólo les dan una beca a sus candidatos, ponen veladoras para resultar electos y luego a nadar de muertito.
Podemos cuestionar las razones por las que los partidos designan a tal o cual persona para esos cargos que los llevarán al cabildo sí, o si, pero creo que el verdadero cuestionamiento debe venir de los propios partidos, no creo que estén felices por tener como sus militantes y representantes a integrantes del coro de serafines que rodea a los Gallardo –regencia de por medio de parte del ingeniero Gilberto Villafuerte en Soledad, pero ese es otro tema– en sus gobiernos; literalmente estamos frente a ayuntamientos que han logrado la unanimidad, una proeza gigantesca en estos tiempos, los del máximo diferendo en la sociedad.
Temario
Ponga Usted atención a los siguientes temas:
- La Barra Mexicana Colegio de Abogados, que encabeza en San Luis Potosí la licenciada Angelina Acosta, ha puesto en la palestra un tema cuya gravedad es muy alta y que evidencia aún más a la Asamblea de Vagos, y es la iniciativa preferente para dar existencia y operatividad al Sistema Estatal Anticorrupción SAE; Juan Manuel Carreras López anunció que la presentaba así para que en 45 días le dieran curso, como marca la Constitución, y los diputados la ignoraron.
- Vivillos los integrantes de la referida Asamblea pidieron al Poder Ejecutivo que le quitara la categoría de “preferente” porque era muy extensa y tarde se les haría con ella, y sí, el complaciente Carreritas les obsequió la gracia de que no se echaran prisas con el SAE, sólo que para entonces ya había pasado el plazo constitucional. Los integrantes de la Asamblea de Vagos, pueden enfrentar un juicio, pero de esos serios, no los que se les presentan a diario por razones de grilla, sino de una prestigiosa, seria y profesional barra de abogados, esté atento.
- Uber, si, hay para rato en ese conflicto artificial y ya muy violento.
Leonel Serrato Sánchez
unpuebloquieto@gmail.com
