Texto: Antonio González Vázquez
Fotografía: Elizabeth Hidrobo
Seis mil novecientas cincuenta y nueve mujeres han sido agredidas sexualmente en San Luis Potosí durante los últimos veinte años; un promedio de 347.95 ataques sexuales por año. Casi una violación sexual por día durante las últimas dos décadas.
Brutalidad pura, lascivia desatada, perversidad incontenible.
De 2015 a julio de 2017, ya en el gobierno de Juan Manuel Carreras López suman 894 agresiones sexuales denunciadas ante el Ministerio Público.
El año 2000 ha sido el de más ataques sexuales en los últimos 20 años con 694 denuncias y el de menor incidencia, 2014 con 147.
Con 335 ataques sexuales de 2016 se tiene el año de más violaciones en el último lustro, pero esa no es la peor de las noticias, lo grave es que de enero a julio de 2017 iban 284 denuncias, ya nueve más que las denuncias de todo el 2005 que cerró con 275.
El lustro con más violaciones sexuales denunciadas fue el del 2000 a 2004 con 2 mil 235, le sigue el 2005-2009, con mil 713 y después el 2010-2014 con mil 396.
Entre 1997 y 1999 para cerrar el siglo pasado, hubo 716 agresiones sexuales.
Los datos corresponden a la estadística de delitos del fuero común del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública que ofrece información de 1997 a la fecha.
La última agresión sexual fue en contra de Berenice Segura, herida y ultrajada en un vehículo de transporte de personal. El hecho ocurrió el pasado martes en la avenida Ricardo Gallardo Cardona del municipio de Soledad de Graciano Sánchez.
La joven madre de dos menores y de apenas 25 años de edad, se encuentra internada en el Hospital General de Soledad donde es atendida de las gravísimas lesiones que le infringió su agresor con arma blanca.
Se estima que por cada denuncia de abuso sexual presentada existe una cifra negra de diez casos que se quedan en el anonimato, que las mujeres se callan porque hay una enorme desconfianza en las autoridades ministeriales que suelen revictimizarlas.
