Por Antonio González Vázquez
En información que circula en redes sociales y mensajes electrónicos , se denuncia que a su llegada a la Auditora Superior del Estado (ASE) Rocío Elizabeth Cervantes Salgado, incrementó al doble no solo su salario sino el de sus amigos más cercanos, además de que autorizó nombramientos, sueldos y compensaciones de sus allegados.
El texto se empezó a distribuir luego de que el Congreso del Estado dio a conocer la terna de aspirantes de los que saldrá el nuevo Auditor Superior del Estado. “Es insostenible la situación que se está observando en el organismo fiscalizador del estado, toda vez que se observa que el personal de primer nivel junto con la encargada de la Auditoria Superior del Estado está incurriendo en graves irregularidades al manejar los recursos a su antojo y contentillo.
Tanto esta funcionaria como sus promotores se manejan bajo influencias y poder, desde la llegada de esta mujer se impusieron altos sueldos y jugosas compensaciones, todo ello recayendo en severos actos de corrupción.
Es más que indignante los exorbitantes que hay en este organismo auditor, la funcionaria percibe más de 117 mil pesos mensuales, seguida por el coordinador de auditorías especial, David Mendoza con una percepción de 70 mil pesos mensuales, del jefe de archivo Giovanne Carlo Santoyo con casi 67 mil pesos, así también se encuentra la polémica jefa del departamento de servicio civil, María del Rocío Torres Armenta con más de 66 mil pesos mensuales –a ella se le señala de haber colocado a sus familiares trabajadores del gobierno del estado como beneficiarios de los seguros de varios de los empleados de la dependencia, caso que no se investigó por la anterior administración de José de Jesús Martínez Loredo-.
A pesar de las contables anomalías que se han evidenciado a lo largo del año en contra de la Auditoria Superior del Estado, no ha existido a una autoridad que meta a mano a los serios problemas que no sólo son de carácter financiero, sino administrativo y legal.
En este caso, hay que señalar puntualmente que ante tanto despilfarro y malos manejos, debiera de impedirse la participación legal de la encargada del despacho de la ASE para contender por la titularidad de dicho organismo, cargo que actualmente se decide en el Congreso del Estado.
La funcionaria se conduce bajo la impunidad y la protección de su familia política, documentada desde el padrinazgo del Secretario de Finanzas del Gobierno del Estado, José Luis Ugalde Montes, quien busca protegerla bajo el interés que tiene de convertirse en Senador de la República.