Por Antonio González Vázquez
Xavier Nava parece ser la única alternativa real de oposición electoral a la segura intención de reelección de Ricardo Gallardo Juárez. En el PRI no hay prospectos y en el PAN tampoco.
La presunta intención de Sonia Mendoza, derrotada en las elecciones para gobernador en 2015 y la inusitada baladronada de Arturo Ramos Medellín, no deja de ser más que una broma.
En Acción Nacional, ya sea en el bando del Círculo Azul o en el del Zapatismo y grupos afines, no hay nadie con cierto liderazgo que pueda aspirar a ganar las elecciones municipales de 2018. El partido se ha quedado estancado en la mezquindad de conflictos e intereses y se han olvidado de generar más y mejores cuadros.
De hecho, son los mismos de siempre, solo que más viejos y más mañosos.
Así las cosas, de todos los que firmaron un desplegado en apoyo a Xavier Nava, ninguno podría ser candidato porque sencillamente su tiempo ya pasó. Otros no tienen la representación necesaria y otros ya no figuran más allá de las instalaciones del partido.
El partido tendrá su proceso de elección del candidato a la presidencia municipal, pero Nava cuenta con el apoyo de la dirigencia estatal y seguramente el Comité Municipal no objetará nada pues su dirigente en la capital quiere ser diputado.
Todo va en camino de que Nava Palacios sea el candidato a la alcaldía porque a todos en el PAN les conviene.
El anunció del aún diputado federal de declinar a su pretensión de ser candidato independiente refleja que la estrategia de inicio camina como se esperaba. Con los setenta que le pidieron ser candidato, contaría con el apoyo que sea necesario para la elección interna.
No hay problema.
El verdadero problema estará en la constitucional.
El ayuntamiento acaba de publicar en la prensa a través de sus gacetillas, que en lo que va de la administración se han gastado 162 millones de pesos en programas sociales, o lo que es lo mismo, en la compra adelantada de simpatías electorales. Asegura el Gallardismo que han beneficiado a unas 200 mil personas y lo dicen sin pena alguna.
El dinero público para la promoción personalizada del alcalde.
Para Nava ese es el verdadero reto.
Ricardo Gallardo ganó las elecciones de 2015 con 131 mil votos. Nava y el PAN y las alianzas que se construyan en torno al proyecto, necesitarán el doble para aspirar a ganar, puesto que resulta obvio que las dádivas desde el ayuntamiento les darán miles y miles de votos más.