El Catalejo es el resultado de las mentes desorientadas de los reporterillos de Astrolabio Diario Digital
Cada día que se acercan las definiciones partidistas con miras a las elecciones del 1 de julio, los autoproclamados en el papel de políticos dejan ver que ni forman partidos, porque para ellos los postulados e ideales no cuentan, ni son políticos, porque anteponen sus intereses personales y de grupo por encima del bien común. No escapan de dejar ver lo que hay tras sus caretas, por mucho que pretendan hacer creer a los electores que trabajan en alianzas políticas, que nada tienen de tales porque ni son afines en ideología ni lo hacen por aumentar las posibilidades de que se atienda el bien común. Más que alianzas, exhiben con claridad su condición de gavilleros que se confabulan para hacer de las votaciones la justificación ante la ciudadanía para repartirse los cargos públicos y, con ello, el acceso al erario como un mero botín a repartirse y del que esperan sacar algo, así sea migajas. En sus cálculos de fuerzas como partidos-gavillas, las imposiciones y sometimientos con que interactúan han expuesto como el líder de la gavilla azul se somete a la gavilla amarilla, cual caquito de poca monta, que por acceder a lo que sea que le alcance del botín, está dispuesto a empezar desde abajo…
Caja Negra: Solo falta que Azuara les lave uno de sus Jaguarcitos