Por Victoriano Martínez
La historia de Minera San Xavier (MSX) en Cerro de San Pedro ha sido la historia del abuso descarado al estilo de los conquistadores que cambiaron espejitos por oro, aunque con una enorme diferencia: los canadienses cambiaron cianuro por oro.
Aleida Azamar Alonso, profesora-investigadora en el Departamento de Producción Económica de la Universidad Autónoma Metropolitana, Xochimilco (UAM-X), estimó los ingresos de la MSX entre 1997 y 2013 en mil 758 millones de dólares.
New Gold, la empresa operadora de la MSX, reporta en su sitio Web una producción de oro de 2014 a 2016 de 240 mil onzas de oro, en tanto que en ese mismo periodo alcanzó una producción de tres millones y medio de onzas de plata. Los ingresos se estiman en alrededor de 365 millones de dólares.
Son cifras que contrastan con lo paupérrima que resulta la economía del municipio que le genera tanta riqueza a la compañía canadiense.
En 2014, New Gold reporta una producción de oro de 70 mil onzas y una de plata de 1.1 millones de onzas, lo que se traduciría en un ingreso para la compañía por más de 2 mil 200 millones de pesos. El ayuntamiento de Cerro de San Pedro ejerció ese año un presupuesto de 37.78 millones de pesos. Es decir, gastó el equivalente al 1.69 por ciento de lo que la MSX se llevó.
Para el año siguiente, mientras la MSX le reportaba ingresos a New Gold por casi 3 mil 300 millones de pesos, el ayuntamiento ejercía un presupuesto de 35.9 millones de pesos, apenas el 1.09 de las ganancias que le generaba su territorio a los canadienses.
Para 2016, cuando se anuncia el presunto cierre de la MSX, New Gold reporta una producción de 65 mil onzas de oro y 0.9 millones de onzas de plata. Un ingreso de poco más de 2 mil millones de pesos. Y el ayuntamiento de Cerro de San Pedro ejerció 40.2 millones de pesos, apenas un 1.98 por ciento de lo que la minera se llevó de su territorio.
Ese año comenzó la liquidación del personal y el delgado de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, Edgar Durón Puente, afirmó entonces que la MSX mantendría una plantilla de al menos 200 empleados hasta su cierre definitivo dos años después, es decir, por estas fechas.
También se dijo entonces que en seis meses se podría cuantificar el daño ambiental dejado por la MSX en Cerro de San Pedro.
Fernando Díaz Barriga, profesor investigador de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP), advirtió entonces que la empresa canadiense no atendió las 100 recomendaciones que emitió la UASLP como condiciones para que operara la explotación a cielo abierto y “ahora se ven las consecuencias”.
Después de más de dos décadas de la presencia de Minera San Xavier en Cerro de San Pedro, las consecuencias siguen apareciendo, sin que haya autoridad que apoye a los afectados para que obtengan una remediación acorde a la grave contaminación dejada.
Este viernes un grupo de ejidatarios de Cuesta de Campa protestaron porque la MSX no les termina de pagar seis millones de pesos por la renta de 42 hectáreas para depositar en ellas miles de toneladas de tierra ciuanurada, y anuncian que presentarán demanda en el Tribunal Agrario para exigir la remediación de sus tierras.
La avaricia de la empresa canadiense no tiene medida: no pagar seis millones de pesos cuando tan sólo en 2016 obtuvo ingresos por más de dos mil millones de pesos.
Peor aún, dejar las 42 hectáreas que utilizó en renta inservibles con tierra contaminada con cianuro, ante su incumplimiento en el pago, describen el paso de New Golden por Cerro de San Pedro como el abusivo extremo que entrega cianuro a cambio de oro.
