Abelardo Medellín
El delito de homicidio calificado en tentativa agravada por el que la Fiscalía General del Estado pretende que se le vincule a proceso a Fernando N., alias “El Tiburón”, es “jurídicamente excesivo, pero necesario”, opinó el exdiputado local y abogado penalista Edgardo Hernández Contreras.
Hernández Contreras explicó que el juzgador encargado del caso debe tomar en cuenta factores como el contexto y la perspectiva social para resolver en el caso del joven de 15 años presuntamente agredido en la capital potosina por Fernando N., ya que de lo contrario, el mensaje a la ciudadanía sería que un ciudadano puede cometer violencia contra otro y quedar impune.
El exdiputado explicó que el sistema penal actual está diseñado para que “pocas personas lleguen a prisión”, ya que se juzga con la idea de que a través de medidas reparatorias el imputado evite la cárcel.
Debido a este diseño, en el caso de Fernando N. se tuvo que optar por un delito que asegurara que el imputado obtuviera prisión preventiva.
“Los delitos que establecen una prisión preventiva oficiosa no alcanzan las lesiones que este individuo, bestia, le propinó al jovencito, porque así está en la ley, así lo contempla. Si checamos nosotros el catálogo de delitos que alcancen prisión preventiva oficiosa, no aparecen lesiones agravadas o calificadas, que es la tesitura legal para este hecho en particular”.
El también abogado aseveró que la sociedad en su conjunto, luego de enterarse y dar cuenta de la agresión que presuntamente perpetró Fernando N., no piensa en medidas reparatorias, sino en recluir al responsable y que se le juzgue con perspectiva social.
“El juez debe de juzgar con esa perspectiva social, ojo, juzgar con perspectiva social y no ceñirse a lo que la ley pueda darle recovecos al fulano para que alcance su libertad, por eso para mí lo que está solicitando la Fiscalía es excesivo, pero es necesario por un tema social y por un tema de garantía jurídica precisamente para la sociedad”, afirmó.
Hernández Contreras dijo que el juez que lleve el caso también deberá considerar como parte de la argumentación para una resolución, el hecho de que se presume que esta no es la primera vez que Fernando N. tiene un desplante violento.
“Se llama a los jueces administradores de justicia, administrando justicia desde la parte jurídica, pero también desde la parte social, el bien jurídico que debe proteger y tutelar el juez es la vida y la vida de este jovencito ya fue marcada”.
De acuerdo con Hernández Contreras, al conocer el caso y las pruebas que hay sobre el mismo, es claro que se justifica el delito de homicidio calificado en grado de tentativa.
“Hubo lesiones calificadas como las describe la ley, hubo premeditación, hubo ventaja, hubo alevosía, hubo traición y hubo una cruel perversidad para cometer este acto y puede estar justificado, porque en uno de esos golpes lo pudo haber matado, por supuesto que sí y qué bueno que no fue así”, dijo.
El abogado aseveró que será la forma en que se argumenten las condiciones del delito las que determinarán si se logra o no vincular a proceso al imputado y llevarlo a prisión; no contar con los argumentos suficientes para comprobar la alevosía o la conducta ventajosa del agresor, podría provocar que quede en libertad.
“Confío en que la Fiscalía haya integrado debidamente la carpeta de investigación con todos los datos de prueba, con todos los elementos. Además, hablamos de un menor, hablamos que no metió las manos, que es un hombre diestro en el combate, que su intención sí fue lastimarlo y que aparte indignó socialmente a toda una nación”, aseveró.
