Abelardo Medellín
Las amenazas emitidas el día de ayer por Ricardo Gallardo Juárez, ex alcalde capitalino, en contra del gobernador potosino, Juan Manuel Carreras López, revelan “la prepotencia de los señores Gallardo, quienes se atreven a propalar una serie de insultos sin una base ni explicación convincente a las personas que fueron ayer a esta plaza”, criticó en entrevista el analista político Eduardo Martínez Benavente.
La tarde del lunes 7 de junio, Ricardo Gallardo Cardona, candidato de la coalición “Juntos Haremos Historia”, citó a una reunión multitudinaria en la plaza de Fundadores para celebrar su supuesto triunfo en la elección de gobernador; durante el evento, su padre, Ricardo Gallardo Juárez, tomó un momento para lanzar un mensaje al gobernador Carreras López, en el cual le advirtió que, si de alguna forma llegaba a intervenir o hacer “un fraude”, se lo iba a “llevar la chingada”.
De acuerdo con Martínez Benavente, el comentario de Gallardo Juárez pareciera expresarle al gobernador que “tú sabes que soy intocable, porque mi hijo va a ser gobernador del estado y podemos darles una revisada a tus cuentas que no te la vas a acabar”.
El analista potosino afirmó que el mensaje del ex alcalde capitalino es sorpresivo si se toma en cuenta que Gallardo Cardona ya lleva una ventaja en número de votos de acuerdo con el Programa de Resultados Electorales Preliminares: “los veo muy nerviosos, no entiendo, el PREP dice que Gallardo va arriba como con 28 mil votos y ya van el 84 por ciento de las casillas, pues es técnicamente imposible que se reviertan los resultados, no sé que los trae nerviosos”.
En este sentido, consideró que quizá el mensaje “nervioso” de Gallardo Juárez puede deberse a la posibilidad de que se anule la elección derivado de que el candidato del Partido Verde excedió su tope efectivo de campaña.
“Se excedió en gastos de campaña por cerca de tres millones de pesos, es una violación constitucional […] si hay una anulación él [Gallardo Cardona] no podría participar, no sé si eso es lo que lo trae nervioso, si hubiera querido hacer una reclamación pudo ser en un desplegado para hablar del fraude de hace tres años y el reclamo de que no lo vuelva a cometer”, recordó.
Martínez Benavente aseguró que ni siquiera Gallardo Cardona se imaginó el nivel de reclamo que lanzaría su padre ayer en la Plaza de Fundadores, pues “prácticamente el hijo no lo festejó, él está hablando de conciliación, un gobierno que va a respetar a todo mundo y luego el padre se atreve, en una plaza pública, envalentonado porque el hijo va a ser gobernador, pues le está dando traste a todos los compromisos que tiene o ha presumido Gallardo hijo. Estuvo mal”.
El analista consideró que el mensaje del día de ayer es una señal clara de que Gallardo Juárez será un perfil político que seguirá interviniendo en actos de gobierno si es que Gallardo Cardona llega a asumir el cargo: “probablemente esté metiéndose con funcionarios, mala señal, mal mensaje, por donde se quiera ver”, agregó.
Comentó por igual que la mayoría de los potosinos ya esperan un gobierno “violento, represor y vengativo” de parte de la gallardía.
“Lo que no han visto es que si la oposición, Octavio Pedrozo y Xavier Nava, logran limar asperezas, formarían un frente importante, muy sólido, que pararía o estaría en condiciones de parar cualquier exceso de esta administración, porque el que salió a sentirse el papá de los pollitos es Gallardo Juárez”, remarcó.
Asimismo, expuso que la falta de respuesta de parte de Juan Manuel Carreras ante las amenazas es el actuar esperado de un gobernador, pero afirmó que “tiene que dar una respuesta a su estilo, que no sea con insultos, pero sí amerita que le solicite las pruebas de en qué ha intervenido”.
