Fernanda Durán
En el marco del desfile cívico militar por la conmemoración de la Independencia de México, el presidente Andrés Manuel López Obrador dio a conocer que presentará un acuerdo ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para que los gobiernos del mundo atiendan sus principales problemas, como detener “con urgencia” la guerra en Ucrania, así como la creación de un comité para el diálogo y la paz.
El mandatario aseguró que la propuesta se basa en una tregua de cinco años con el fin de lograr la paz mundial. Además, reprochó a las naciones y diversos grupos de interés que provocaron el conflicto armado entre Rusia y Ucrania.
“Se trata de buscar con urgencia un acuerdo para detener la guerra en Ucrania, y lograr hacia adelante una tregua de cuando menos cinco años en favor de la paz entre todas las naciones, para dedicar todo ese tiempo a enfrentar los grandes y graves problemas económicos y sociales que aquejan y atormentan a los pueblos del mundo”.
El jefe del Ejecutivo federal indicó que la política es el único instrumento para evitar la guerra, sin embargo, los intereses dentro de las posiciones de poder en las naciones conducen al conflicto bélico, el cual optan en profundizarlo, en vez de cesarlo.
“Opta por profundizarlo sin que les importe el sufrimiento que infringen a la humanidad ni el daño que causan al bienestar de las naciones y de las sociedades”.
“Habría que empezar por preguntarnos si no se pudo evitar la guerra y si la ONU y los políticos de las principales potencias no fallaron en la responsabilidad de promover el diálogo entre las partes para resolver pacíficamente la controversia”.
Por esta razón, López Obrador planteó el comité para el Diálogo y la Paz, con el objetivo de evitar que continúe la guerra, mismo que estaría integrado, si aceptan, “por los jefes de estado de la India y el Vaticano, así como el secretario general de la ONU, António Guterres, el Papa Francisco y el primer ministro indio, Narendra Modi.
“La misión pacificadora debe buscar de inmediato el cese de hostilidades en Ucrania y el inicio de pláticas directas con el presidente Zelenski de Ucrania y con el presidente Putin, de Rusia. Sin paz, no habrá ni crecimiento económico ni mucho menos justicia, gobernar no debe ser un ejercicio de hegemonía o de dominio, sino bienestar para los pueblos. El poder solo tiene sentido y se convierte en virtud cuando se une al servicio de los demás, ojalá tengamos éxito con esta iniciativa”.
Posteriormente, el presidente agradeció a las Fuerzas Amadas, entre las que incluyó a la Guardia Nacional, por su lealtad a lo largo del sexenio.
“Agradezco de manera fraterna, sincera la lealtad de las Fuerzas Armadas de México, tanto de la Secretaría de Marina, como de la Secretaría de la Defensa Nacional, con su nueva rama, la Guardia Nacional, institución responsable de garantizar con eficiencia y respeto a los derechos humanos, la seguridad pública en nuestro país”.
En contraste con propuesta de diálogo ante la ONU sobre la paz y seguridad de los pueblos, México se ha limitado a tratar el tema de transferencia de la Guardia Nacional a la Sedena con las Naciones Unidas, a pesar de que ha sido condenada por representantes del organismo.
Ejemplo de ello fue la denuncia de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Nada Al-Nashif, quien definió como un retroceso en materia de derechos humanos la decisión del Gobierno federal, pues afirmó que profundiza una estrategia de “militarización” que “no ha resultado en una reducción sostenida de la delincuencia” desde 2006.
“Las reformas dejan a México sin una fuerza policial civil a nivel federal, consolidando aún más el ya prominente papel de las Fuerzas Armadas en la seguridad pública en México. Los mecanismos de derechos humanos han señalado claramente que las Fuerzas Armadas sólo deben intervenir en la seguridad pública de forma temporal, en circunstancias excepcionales, como último recurso, y siempre bajo la supervisión efectiva de órganos civiles independientes”, afirmó.
