Carlos Rubio
La pandemia ha cambiado la vida en todo el mundo, ha transformado las formas en que nos relacionamos y nos ha separado de nuestros seres queridos. Tal es el caso de Arturo, quien es uno de los médicos que, en San Luis Potosí, se encuentra luchando contra esta enfermedad, tratando de salvar la mayor cantidad de vidas posibles y de evitar que el coronavirus Covid-19 se convierta en una catástrofe para el estado.
En días anteriores circularon en redes sociales dos fotografías de un médico posando con un traje especial, googles, cubrebocas y guantes, pareciera que estaba sonriendo, pero el equipo de protección impedía delatar la mínima emoción. Lo destacado de la imagen fue que sobre su pecho había colocado una fotografía de él donde se ve su rostro descubierto y sonriente; en su espalda había otra fotografía donde aparecen su hijo, su hermano y sus padres, como un aviso de que bajo el traje ser encontraba un ser humano con razones para sobrevivir, pero de igual forma arriesgaría su vida para salvar a otros.
Astrolabio Diario Digital tuvo la oportunidad de platicar con Luis Arturo López Reveles, el médico que llevó a cabo esta acción.
- Astrolabio: ¿Por qué decidiste hacer esto?
- Arturo López: Yo había visto que los médicos italianos lo hacían porque pasan mucho tiempo con los pacientes en las terapias intensivas. Como un intento para hacer más amable el trato entre médico paciente decidieron poner unas fotos donde se muestran ellos como son y con caras sonrientes como para tratar también de alegrarlos a ellos. Yo aquí también utilizo un traje así y después de ver eso razoné y dije: ¿por qué no hacerlo aquí también?
Arturo es originario de la Ciudad de México, donde estudió medicina en la Universidad Panamericana. Desde hace un tiempo vive en Matehuala, donde ahora se encuentra su familia. Trabaja en la clínica 50 del Instituto Mexicano del Seguro Social y dos hospitales privados. Antes de la pandemia, su rutina consistía en laborar durante toda la semana en la capital y el fin de semana reunirse con su hijo y sus papás en Matehuala, sin embargo, dada la situación actual, hace más de un mes y medio que no puede verlos, por miedo a contagiarlos del virus.
Como médico urgenciólogo, se encuentra en un área de primer contacto para los pacientes que acudan contagiados de coronavirus, pero fue hasta que llegó el primer paciente a su sala, que se dio cuenta de la gravedad de la situación. “Nunca me imaginé que me iba a encontrar con pacientes así”.
Según comenta, colocar sus fotografías para que puedan conocerlo le ayuda a fortalecer la relación médico – paciente, para que puedan tener mayor confianza en él y decirle realmente todos los síntomas y problemas de salud que tienen. “No es lo mismo que no te conozcan físicamente, pues se siente solo una seriedad muy seca”.
El traje especial que utiliza lo tuvo que comprar él porque aunque considera que la clínica les ha dado el equipo necesario, sigue siendo el mínimo y no está mal reforzar las medidas. Cada traje le cuesta 190 pesos y debe cambiarlo diariamente. Además, también decidió comprar otra mascarilla especial con un costo de mil 500 pesos, la cual usará cuando la situación se vuelva más complicada y la afluencia de pacientes sea mayor.
Arturo ha tenido que intubar a dos pacientes de gravedad por coronavirus, que lamentablemente perdieron la vida. Hasta ahora continúa atendiendo a los pacientes que llegan a su área.
- Astrolabio: ¿Has tenido miedo de contagiarte?
- Arturo: Sí claro, sí te da mucho miedo y mucha ansiedad de contagiarte. Hay personas, inclusive médicos que no quieren atenderlos, pero sinceramente lo que a mí me inspiró fueron los médicos de España y los médicos de Italia que también están en la lucha contra esto y dije pues nos toca a nosotros, tenemos que sacar adelante a la gente de aquí.
La lucha de Arturo ya no es simplemente contra el coronavirus, también lo es contra la monotonía: despertar todos los días para trabajar desde las siete de la mañana hasta las nueve de la noche con un equipo especial que lo hace parecer como si no tuviera expresión, como si no estuviera cansado y nostálgico por su familia. Después debe regresar a su casa donde vive solo y tiene que seguir manteniendo las medidas sanitarias con la ropa que usó durante todo el día.
Y así como se ha visto a lo largo de estas semanas, también él ha sido víctima de discriminación, pero de quienes menos llegó a pensarlo, sus propios compañeros. “Como yo he sido el médico que más ha estado en contacto con estos pacientes, me tuvieron que hacer la prueba para ver si yo no estaba con la infección, entonces era como, ‘en lo que sale la prueba no vengas con nosotros’”.
Ha sentido desilusión por parte de la gente que no toma en serio la situación y no saben lo que los médicos deben sacrificar para atenderlos. Hay incluso quienes debieron abandonar sus casas para evitar contagiar a su familia.
“No se dan cuenta que el sistema de salud mexicano no es el ideal y vamos a colapsar. Se va a tener que da prioridad a los pacientes más jóvenes, lamentablemente. Yo veo como están en las calles jugando, paseándose y digo, es que no es posible que sean así”.
Arturo vislumbra un panorama complicado para el país y mantiene una constante preocupación por el inminente riesgo en el que se encuentra de ser contagiado, siendo que, hasta el día de ayer martes 14 de abril, sumaban 535 trabajadores del sector salud que han dado positivo a Covid-19, además de nueve defunciones, cifras que lamentablemente seguirán aumentando.
Por lo pronto, la familia de Arturo continuará cuidando su espalda a lo lejos, mientras él seguirá entrando a una sala donde se encuentra el virus que ha matado a más de 128 mil personas en el mundo.
“Yo sinceramente espero tiempos un poco difíciles, no creo ver todavía a mi familia en este mes ni el otro”.
