María Ruiz
Las mujeres periodistas de San Luis Potosí enfrentan desafíos constantes que van desde la violencia estructural hasta la exclusión en las decisiones editoriales. Su profesión, ya de por sí exigente, se vuelve aún más compleja cuando se intersecta con los estereotipos y las prácticas discriminatorias de género que persisten, tanto dentro como fuera de las redacciones.
La falta de protocolos efectivos para protegerlas de agresiones, los discursos de odio en su contra y la resistencia al lenguaje inclusivo en los medios son solo algunos de los problemas que se discutieron durante la reciente Mesa de Diálogo sobre Perspectiva de Género en Medios de Comunicación, organizada por el Instituto de las Mujeres del Estado de San Luis Potosí (IMES).
En este espacio se destacó cómo los medios de comunicación juegan un papel crucial en la construcción de narrativas sociales, ya sea para perpetuar la violencia simbólica o para combatirla.
Las participantes subrayaron que lo que se publica no solo refleja la realidad, sino que también moldea percepciones y opiniones en la sociedad. Por ello, asumir una perspectiva de género en el ejercicio periodístico es un paso indispensable hacia la construcción de una visión más justa e inclusiva del mundo.
Las propuestas planteadas durante la mesa de diálogo buscaron transformar estas problemáticas en oportunidades de cambio. Desde la implementación de un lenguaje incluyente que visibilice a las mujeres y elimine estereotipos, hasta la creación de protocolos de protección específicos para las periodistas, las soluciones apuntaron a garantizar tanto la seguridad como la equidad en el ejercicio profesional.
Además, se habló de la urgencia de capacitar continuamente a los profesionales de los medios en temas como derechos humanos, ética periodística y perspectiva de género, reconociendo que una cobertura informativa responsable no solo evita la revictimización, sino que también contribuye a resaltar la diversidad de experiencias femeninas.
Las participantes también hicieron un llamado a las instituciones gubernamentales para traducir estas propuestas en políticas públicas concretas, con la inclusión activa de las mujeres periodistas en su diseño e implementación.
Asimismo, se enfatizó la importancia de establecer mecanismos claros de monitoreo y evaluación que aseguren el cumplimiento de dichas acciones dentro de los mismos medios de comunicación y de aplicar sanciones efectivas ante posibles incumplimientos.
Esta mesa de diálogo tambien fue un espacio para denunciar las condiciones adversas que enfrentan las mujeres periodistas, como sueldos injustos, explotación laboral y acoso laboral e institucional por parte de las fuentes de información que cubren, por lo que solicitaron al IMES articular estrategias que permitan transformar a los medios de comunicación en aliados de la equidad de género.