María Ruiz
La Feria Regional de Villa de Pozos (Ferepo) está repleta de declaraciones contradictorias de las autoridades sobre el origen de los recursos que financiaron el evento.
El gobernador Ricardo Gallardo Cardona y el alcalde de la capital Enrique Galindo Ceballos se deslindaron de la responsabilidad en los gastos de la feria, mientras que la concejala presidenta de Villa de Pozos, María Teresa de Jesús Rivera Acevedo, aseguró que su origen proviene de aportaciones de empresarios y comerciantes locales.
El origen de los fondos para la Ferepo ha estado rodeado de falta de claridad. Inicialmente, Rivera Acevedo declaró que el evento se financió a través de una “donación” del gobernador Gallardo Cardona. Sin embargo, al ser cuestionada por estas afirmaciones, rectificó su postura y negó que existiera tal donación.
“Fue gracias a la participación de comerciantes y algunos empresarios”. A pesar de esta declaración, no se ha revelado con precisión el nombre de las empresas o empresarios que aportaron los recursos para financiar el evento ni los montos exactos de la inversión.
Por su parte, René Oyarvide Ibarra, secretario del Concejo, afirmó en un boletín informativo que la feria fue patrocinada por empresarios, comerciantes y expositores, pero tampoco detalló quiénes fueron los responsables ni especificó los costos totales del evento.
Oyarvide Ibarra prometió que se presentará un informe de gastos, pero hasta el momento la información ofrecida es insuficiente.
Falta de claridad y procesos necesarios
Anteriormente, la concejala regidora Maribel Lemoine Loredo aclaró que para que una donación se lleve a cabo legalmente para un municipio, se requiere un proceso administrativo y jurídico riguroso.
En el caso de Villa de Pozos, que recién ha sido constituido como municipio, el proceso es aún más complejo, ya que la estructura administrativa no está completamente consolidada. Para que una donación sea legalmente aceptada y registrada, debe cumplirse con varios requisitos.
El evento de la Ferepo contó con agrupaciones musicales, actividades diversas, pero no se ha detallado el costo de estos espectáculos ni de la infraestructura necesaria para llevar a cabo la feria.
Tampoco se han explicado los mecanismos legales que permitieron que empresarios y comerciantes financiaran una feria de esta envergadura en un municipio que aún está en proceso de conformación administrativa.