Abelardo Medellín
Si la verdadera razón de desmantelar la biblioteca del Centro de Información en Investigación y Posgrados (CIIP) de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP) es la atención a un problema estructural, esto significaría que la máxima casa de estudios incurrió en una “negligencia grave” desde hace dos décadas, opinó Francisco Hernández Rocha, licenciado en Derecho y estudiante de la Maestría en Derechos Humanos que integra el grupo en defensa de este espacio.
Ante los recientes posicionamientos de la UASLP respecto del proyecto que pretende retirar la biblioteca del CIIP, uno de los voceros del movimiento en favor de este centro e integrante del estudiantado puso en duda los argumentos ofrecidos por el rector Alejandro Zermeño Guerra.
El pasado 6 de junio, el rector Zermeño Guerra aseveró que el plan de reubicar la biblioteca se debía a que un acervo bibliográfico no podía ubicarse en un segundo o tercer piso.
Hernández Rocha señaló que hay un conflicto con el dicho del rector sobre el riesgo estructural, si se considera que el centro ha funcionado con la biblioteca en el tercer piso desde el 2003.
“Desde el momento que se construyó, se construyó pensando que en el tercer piso iba a haber una biblioteca, entonces, pues en dado caso de que no se haya hecho la planeación correcta desde la construcción del edificio, pues evidentemente es una negligencia grave, estamos hablando de 20 años permitiendo un riesgo inminente para la comunidad estudiantil”, afirmó.
El estudiante adelantó que, hasta la fecha, no ha habido novedades de parte de la Rectoría sobre cómo avanza el proyecto que pretende retirar la biblioteca y que hasta ahora el único compromiso de la Universidad ha sido realizar un dictamen de protección civil sobre los posibles riesgos que tiene el edificio del CIIP.
Pese a la versión oficial que refiere a problemas estructurales, Hernández Rocha comentó que al interior de la comunidad estudiantil se tiene la sensación de que esta postura es una mera “pantalla” que derivará en la reubicación de la biblioteca, con la finalidad de beneficiar al Centro de Emprendimiento e Innovación Potosino.
“Se nos ha dicho que no la van a remover, pero no se nos hizo llegar ningún documento, es decir, únicamente dijo el rector ‘mi palabra basta”.
Hernández Rocha reveló que la Rectoría tampoco ha permitido que se sostengan reuniones entre los estudiantes, la comunidad de los posgrados y la gente de la Dirección de Vinculación, misma de la que habría surgido la idea de desmantelar la biblioteca para crecer los espacios del Centro de Emprendimiento.
“Le solicitamos al rector una vía de comunicación con Vinculación y prácticamente la respuesta fue que ese era otro tema”, dijo.
Adicionalmente, el vocero estudiantil opinó que, si la UASLP no comenzado a trasladar la biblioteca a otro lado, esto se puede deber a la presión que han ejercido los estudiantes de posgrado para que no se desmantele este Centro.
“El llamado sería ese, que se respeten los espacios de los universitarios, a fin de cuentas, pues es lo que nos hace desarrollarnos académicamente para posteriormente salir al mundo profesional”, finalizó el vocero.
