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Algunos de los “Salta pa tras”
Por: Eduardo Delgado
Había una vez un grupo de doce “chapulines” que intentaron “saltar” a otros cargos”; cuatro desde su curul y ocho separados. De la docena sólo cuatro lograron su objetivo y a los restantes los “mayoriteo” el fracaso.
El “salto pa´tras” ya lo dieron cinco y de estos un par retornaron felices, otro satisfecho y dos cabizbajos. De los cuatro que hicieron campaña desde el Congreso sólo uno tuvo éxito.
De los tres que faltan del lanzamiento a la inversa uno lo hará con una pesada loza encima, pues obvio fue víctima de su ingenuidad y de una traición política. Otro consiente que su participación sólo fue decorativa y uno más encantado de la vida.
A pesar de que obtuvo menos votos que los nulos, el diputado y líder estatal del Movimiento Eugenio Guadalupe Govea Arcos, volvió contento. Es de esa elite de “chapulines” que acumula una importante cantidad de lanzamientos exitosos.
Ha sido dos veces diputado local, senador y retorno para culminar su tercera legislatura. Volvió feliz porque su partido ganó cuatro municipios y conservara el registro del Movimiento Ciudadano.
En otras palabras aseguró el flujo de un importante monto de recursos, tanto de financiamiento nacional como estatal. Aparte su esposa, Claudia Sofía Corichi García, tiene prácticamente asegurada un escaño en la siguiente legislatura federal.
De los que no dejaron su curul…ni de cobrar…podía decirse que el del fracaso monumental fue el de Crisógono Sánchez Lara. Por la simple razón de que perdió en la contienda por la alcaldía de Tampacán contra un compañero de legislatura: Filemón Hilario Flores, del Partido de la Revolución Democrática, cuyo primer “brinco” fue positivo.
El único que tuvo éxito de los cuatro que hicieron campaña desde su escaño fue el Martín Álvarez Martínez, del Partido Verde Ecologista de México, que contendió y garantizó otros tres años de supervivencia como alcalde de Venado.
Otro “salta montes” que no dejó de cobrar fue Jaen Castilla Jonguitud, del Partido Nueva Alianza. Visto este jueves, en la sesión ordinaria del Congreso, sin el más mínimo rastro de abatido. Sabía que su participación en la contienda por la alcaldía capitalina sólo era en la función de un elemento decorativo, igual que la de su compañero de Conciencia Popular, Jorge Alejandro Vera Noyola, quien acudió ayer a la sala de plenos del Congreso sólo a saludar a sus compañeros.
Víctima de una traición política y familiar, el más abatido de los que hicieron campaña desde su escaño fue el desertor del Partido Verde Ecologista de México y ahora integrante de Acción Nacional, Alfonso Díaz de León Guillén.
Marianela Villanueva Ponce mostró confianza en su afán por “lanzarse” a la legislatura federal, pero fracasó en su intento de hilvanar su segundo “brinco” consecutivo. Ayer regresó derrotada, luego de que creyó jugar en cancha ajena pero con más aficionados en su favor que el local.
Otro de los “grillos” alicaídos fue el panista Rubén Guajardo Barrera, vencido en el sexto distrito por Francisco Xavier Nava Palacios, nieto del extinto líder civilista, Salvador Nava Calvillo. Regresó a la nómina del Poder Legislativo con más pena que gloria.
Este jueves en la sala de plenos del Congreso local el con motivo para lucir sonriente fue el “priecologista” Christian “Chogonito” Sánchez Sánchez. Su incursión en el presupuesto público fue como Defensor de Oficio y enseguida como asesor jurídico en el Ayuntamiento de Tampacán, durante el periodo 2006-2009.
Hace seis años ganó la alcaldía de ese municipio, de donde “salto” al Congreso local y de donde ahora se saldrá impulsado a la sexagésima tercera federal, para superar una docena de años consecutivos sobreviviendo bajo al amparo del presupuesto público.
Además de Vera Noyola y Filemón Hilario, otros que faltan por consumar el salto a la inversa son Fernando Pérez Espinosa y su comadre Ruth Nohemí Tiscareño Agoitia. Esta última contenta, feliz de la vida, porque su “salto” a la siguiente legislatura federal fue exitoso.
