Con azoro hemos visto la posición del gobierno de Fernando Toranzo Fernández a la filtración de imágenes dantescas de los sucesos violentos ocurridos el 27 de abril de 2013. En una gacetilla, la administración de Toranzo se dijo dolida porque se filtren imágenes que dañan a los familiares de las víctimas. De cuando para acá tan decentes y moralinos.
Tras la masiva reproducción de esas imágenes en las que se muestran pilas de cuerpos y cómo los encargados de la seguridad interna del penal preferían huir o esconderse, el gobierno calló como suele hacerlo en momentos de crisis.
En primer lugar, las autoridades se rasgaron las vestiduras con irrefutable indignación porque a su decir, se intentó golpear al gobierno y se intentó desestabilizar el proceso electoral y se buscó generar incertidumbre y miedo.
Sin embargo, no explicaron algo que deberían de tener muy claro: si fue una filtración de imágenes de un reclusorio que administra la Secretaría General de Gobierno, luego entonces habría que investigar a los propios directivos y empleados de esa cárcel.
Tampoco explicaron que el sistema penitenciario nacional tiene un seguimiento puntual por parte de la Secretaría de Gobernación y que ellos, tienen tanta información de lo ocurrido aquella trágica mañana que sería muy sencillo soltarla.
Pero lo que nos debe dejar perplejos es el boletín que con recursos públicos se pagó en la prensa para lavar las culpas del gobierno de Toranzo y demás colaboradores. Con un mísero boletín se buscó apaciguar los ánimos que se despertaron con la difusión de las imágenes.
Por cierto, los custodios que huyeron, que se escondieron o que de plano se hicieron los occisos antes del enfrentamiento que dejo un saldo de trece muertos y 65 heridos, fueron capacitados por el instituto de educación superior propiedad de Juan Manuel Carreras López, candidato del PRI a gobernador.
El boletín destaca quince rubros según los cuales, el CEPRERESO número 1 habría dejado de ser un infierno para transformarse en una sucursal del paraíso.
Esto es lo que reporta el gobierno, el mismo que cumplió parcialmente las recomendaciones emitidas por la CEDH hasta un año después de los acontecimientos sangrientos.
1.- Se consignaron ante la Procuraduría General de Justicia del Estado 12 personas por esos hechos: nueve internos y tres custodios, además que el director del penal en ese entonces, fue destituido de su cargo.
2.-Se trasladaron a 180 internos de alta peligrosidad a penales federales, entre ellos los que provocaron la riña. También se llevaron a cabo traslados a penales interestatales para despresurizar La Pila.
3.- Se cambiaron candados en puertas de cada una de las celdas y en los accesos principales de los dormitorios se colocaron placas metálicas y un cajón de protección que impiden que los candados y cerrojos sean manipulados o violentados por los internos.
4.- Se construyó una barda que separa los dormitorios de talleres y otros espacios del penal para un mejor control.
5.- Se construyó una torre de vigilancia para la sección de dormitorios 4,5 y 6.
6.- Se creó un protocolo del manejo de llaves de puertas, así como una bitácora de quién tiene acceso a las mismas.
7.- 66 nuevos elementos de custodia se integraron a las filas del sistema penitenciario para un mayor reforzamiento y vigilancia.
8.- Se adquirieron nuevas cámaras para el circuito cerrado que cubren la totalidad del penal y que también son monitoreadas desde el C4 de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado.
9.- Se colocó una cerca eléctrica en el área de inhibidores de telefonía celular para que no se tenga acceso a ellos y funcionen adecuadamente.
10.- Se uniformó a la totalidad de internos del penal de La Pila y de los otros centros de reinserción para un mejor control.
11.- Para diferenciar a instructores, proveedores o visitantes de la población interna, al ingresar se les colocan casacas fluorescentes con rotulación especial.
12.- Se fortalecieron los programas de industria penitenciaria, talleres productivos, educación de los niveles primaria, secundaria, bachillerato y licenciatura.
13.- Los reclusos cuentan con instrucción y acondicionamiento físico que fomente su disciplina y el trabajo en equipo.
14.- El exterior del penal de La Pila está custodiado por elementos de la Policía Estatal y por personal del 40 batallón de infantería de la Secretaría de la Defensa nacional-
15.- Hay mayor seguridad para la entrada de visitantes también cambiaron, ya que ahora es más riguroso y todos los paquetes que ingresan son revisados por medio de una máquina de rayos X que detecta objetos o sustancias prohibidas.
Fantástico.
